Estados Unidos llamó ayer a Israel a “reconsiderar” su decisión de autorizar la construcción de 3000 viviendas adicionales para colonos judíos en Jerusalén Este y en la Cisjordania ocupada. “Urgimos a los líderes israelíes a reconsiderar estas decisiones unilaterales y mostrar cautela, ya que esas acciones son contraproducentes y hacen más difícil reanudar negociaciones directas” con los palestinos, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney. La reacción de Washington llega en medio de las crecientes críticas al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. “Estados Unidos se opone a toda acción unilateral, incluyendo la actividad de asentamientos en Cisjordania y la construcción de casas en Jerusalén Este, ya que complican los esfuerzos para reanudar las negociaciones bilaterales directas, y generan el riesgo de prejuzgar el resultado de esas negociaciones”, dijo Toner.