El gobierno estadounidense anunció ayer que enviará 960 observadores a Ucrania para analizar los resultados de la elección del 26 de diciembre en ese país. La Casa Blanca anunció el desbloqueo de 3 millones de dólares en ayuda a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y a otros organismos públicos y no gubernamentales estadounidenses para asegurar el desarrollo de las elecciones ucranianas. Por otro lado, fuentes diplomáticas norteamericanas ratificaron que EE.UU. seguiría respaldando sus intereses en la ex URSS a pesar de las objeciones de Rusia y puso paños fríos a las declaraciones de la semana pasada de Putin. El presidente ruso se había referido a “una dictadura envuelta en una bella fraseología pseudodemocrática “que domina los asuntos internacionales”. La UE reaccionó ayer a la acusación de “colonialismo” de Vladimir Putin contra Occidente por su papel en la crisis ucraniana y dijo que Moscú fue “demasiado lejos”.