EL MUNDO
• SUBNOTA
Los caminos llevan a Roma
Los presidentes estarán codo a codo con reyes y reinas en el funeral del Papa en una pesadilla diplomática que acompañará a la mayor de las reuniones de los líderes mundiales en tiempos modernos, así como una de las mayores reuniones de peregrinos, que se espera que sumen cuatro millones. El presidente Bush estará acompañado por su mujer Laura y una “pequeña delegación” de funcionarios estadounidenses en el funeral en la Ciudad del Vaticano. Edward Kennedy se encuentra entre los políticos estadounidenses que seguramente llegarán, mientras que en Roma se especula si George Bush padre y Bill Clinton también arribarán. El príncipe Carlos postergó su propio casamiento por un día para acompañar a Tony Blair y al arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, a Roma. Kofi Annan estará ahí. El rey Abdullah de Jordania, también. Los diarios italianos estaban excitados con la posibilidad de que el improbable amigo del Papa, Fidel Castro, llegara. A pesar de que Castro declaró un duelo nacional de tres días por el Papa, parece improbable que viaje, aunque con seguridad mandará a un importante representante. El presidente Aleksander Kwasniewski, de Polonia, seguramente asistirá, junto con Lech Walesa, el sindicalista cuyo movimiento Solidaridad fue apoyado firmemente por el Papa contra las autoridades comunistas polacas. El jefe de gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, irá a Roma aunque tiene pocos amigos en la curia después de la ofensiva afirmación sobre la naturaleza secular del Estado español y su aprobación de los matrimonios gay. El rey Juan Carlos y la reina Sofía acompañarán a Zapatero. Italia también cuenta con la llegada de Nelson Mandela y del canciller de Israel, Silvan Shalom, en reconocimiento de los últimos intentos del Papa de forjar confianza y amistad entre el cristianismo y el judaísmo.
Nota madre
Subnotas