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Las balas contra los votos
El gobierno saliente de Andrés Pastrana remarcó que será capaz de garantizar la efectiva realización de las elecciones presidenciales este domingo, mediante el dispositivo de seguridad que puso en marcha hace dos semanas y exhortó a los colombianos a ir a las urnas. El pedido de Pastrana no es simplemente un “cumplido” propio de un tiempo preelectoral. Las estimaciones oficiales hablan de un abstencionismo del 50 por ciento, consecuencia de los enfrentamientos de los últimos tiempos entre guerrillas, militares y paramilitares. Las FARC, la principal guerrilla del país, anunció un boicot a estas elecciones. Ayer hubo tres ataques, presuntamente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y uno de ellos fue una bomba que estalló en una sede de campaña del candidato favorito, Alvaro Uribe. Por la noche, un coche bomba mató a cuatro personas en Sibaté, a 50 km. de Bogotá.
“Vamos a salir a derrotar a los insurgentes con votos y no con balas”, dijo ayer Andrés Pastrana, porque “nuestro principal objetivo en este momento es que se puedan celebrar las elecciones”, Admitió también que los grupos insurgentes tanto paramilitares de ultraderecha como guerrilleros instigan al abstencionismo y que él, como presidente de Colombia, llama al voto. Ante las amenazas en más de 500 de los 1098 municipios en los que habrá votaciones, como los denunciaron observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), Pastrana aseguró que se adoptaron las medidas necesarias.
No obstante, continuaron ayer los ataques de la guerrilla contra la infraestructura del país: uno se registró en una vía que une a los norteños departamentos de La Guajira y Cesar, donde un coche bomba cargado con unos 150 kilos de dinamita destruyó un puente. Además, supuestos miembros urbanos de las FARC lanzaron un artefacto explosivo contra la sede de las autoridades electorales en el departamento de Nariño (sur), ocasionando daños en el sistema de computación de la entidad.
Otro ataque con explosivos estuvo dirigido contra una sede de la campaña del candidato Alvaro Uribe, primero con un 49 por ciento de intención de voto, en la ciudad de Medellín. No hubo víctimas.
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