Por Angeles Espinosa*
Desde Teherán

Al menos 36 personas murieron en dos enfrentamientos separados entre musulmanes sunnitas y chiítas en Pakistán y Afganistán. En el más grave, en la localidad paquistaní de Hangu, un millar de chiítas se disponía a escuchar a uno de sus líderes, cuando se produjo una gran explosión. El atentado, al parecer un ataque suicida, dejó 23 muertos, a los que hay que añadir 8 más, resultados de los disturbios que siguieron. Otras cinco personas perdieron la vida en la ciudad afgana de Herat. Estos incidentes se producen durante la celebración de la Achura, la principal festividad religiosa chiíta.

“Seguía la procesión y había una tribuna lista en el bazar para los discursos de los dirigentes religiosos. Cuando Jurshid Anwar Sajjadi se acercó a ella, se produjo una gran explosión”, relató a la agencia France Presse un policía de Hangu, una ciudad de 90.000 habitantes situada a 175 kilómetros al oeste de Islamabad. “Entonces se produjo un movimiento de pánico entre la multitud; se oyeron otras dos explosiones y se produjo el pánico”, añadió el agente. Pakistán tiene una larga historia de conflictos interconfesionales en los que la minoría chiíta, que supone un 20 por ciento de la población, suele llevar la peor parte. Los sunnitas más radicales tachan a los chiítas de herejes. Se estima que 4000 personas han muerto en incidentes sectarios en ese país desde principios de los años ’90. Las ceremonias de la Achura constituyen un objetivo predilecto de los extremistas y las autoridades suelen reforzar las medidas de seguridad en estas fechas. Más sorprendente fue el estallido de violencia sectaria en Herat, que se saldó con 5 muertos y una cincuentena de heridos, según fuentes hospitalarias citadas por los periodistas locales. Afganistán, donde los chiítas rondan un 19 por ciento de la población, desconocía hasta ahora este tipo de enfrentamientos. Además, todo el país se encontraba en situación de alerta debido a las protestas por las caricaturas danesas de Mahoma que, desde el lunes, han dejado 12 muertos.

* De El País de Madrid. Especial para Página/12.