Dice la tradición que los jueces sólo hablan a través de sus sentencias. Pues algunos también hacen catarsis y critican en ellas. Hay un ejemplo fresco en el fallo de la Cámara Federal que declaró imprescriptibles los crímenes de la Triple A. Allí el camarista Eduardo Freiler le dedica un largo párrafo al ex fiscal del Juicio a las Juntas Julio Strassera y lo responsabiliza de que la investigación sobre la organización terrorista de José López Rega haya sido cerrada en 1981. Recuerda que Strassera en aquel entonces “presentó una forzada pretensión de que se sobreseyera la causa, postura que el juzgador aceptó” y que para eso se basó en desacreditar y tratar de loco a un testigo clave, Salvador Paino, que en 1975 había hasta dibujado un organigrama de la banda, donde aparecían, entre otros, el ex subcomisario Rodolfo Almirón, extraditado esta semana, con más de treinta años de demora. Freiler dice que Strassera hizo aquel planteo “sorpresivamente” y “pese a la existencia” de “materiales reunidos tras esforzados años de investigación”-
Pablo Hirschman era hasta la semana pasada secretario general del Consejo de la Magistratura, donde había llegado bajo el ala del ex supremo Julio Nazareno. El oficialismo lo desplazó y el plenario ya nombró como su sucesor a Hernán Ordiales, un asesor del kirchnerista Carlos Kunkel. La lealtad K de Ordiales fue el dato que todo el mundo destacó ante la noticia. Con el correr de los días, algunos históricos del organismo sacaron a relucir su biografía completa para pintarlo más bien como un exponente de la metamorfosis menemismo-duhaldismo-kirchnerismo: al Consejo llegó con el ex senador justicialista Ricardo Branda (echado de su cargo de director del Banco Central por Néstor Kirchner cuando quedó imputado por las coimas en el Senado), tuvo un cargo en la secretaría general del cuerpo creado a pedido de Nazareno y ya antes de trabajar con Kunkel lo había hecho con ex consejero duhaldista Jorge Casanovas-
Cristina Kirchner realizará la semana que viene su primera incursión europea cuando visite Londres y París. De a poco, al periplo se van agregando nuevas actividades. Por ejemplo, en la capital inglesa, un día antes que arranque el Foro de Líderes Progresistas al que la invitó el premier Gordon Brown, Cristina se encontrará con el famoso historiador marxista Eric Hobsbawn. De 90 años, el historiador –profesor emérito de historia social del Birbeck College, en la Universidad de Londres– la recibirá en su casa de Hampstead. Hubo algún funcionario que la semana pasada se dedicó a hojear la Historia del Siglo XX de Hobsbawn, su libro más popular, y se atragantó cuando repasó lo que el historiador dice allí de Perón. Por ejemplo, cuando sostiene que “es innegable el contenido antisemita en los peronistas” o cuando habla de la “abierta y reconocida influencia del fascismo europeo en Perón”. El funcionario prometió que le haría llegar una advertencia a la Presidenta para que estuviera precavida sobre lo podía esperarle-
Un videochat que organizó el diario La Nación con la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, desató una avalancha de comentarios dinosáuricos de los lectores del centenario matutino. En total, terminaron más de la mitad de los comentarios eliminados por el moderador, que tuvo que vérselas con un cúmulo de insultos baratos, mezclados con reivindicaciones explícitas del terrorismo de Estado. “Cuánto trabajo que tiene hoy el moderador”, concluyó uno de los lectores, que se quejó por los que “reportaban el abuso” al por mayor-
Hay quienes dicen que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner es tímida y por eso a veces aparece más fría de lo que en realidad es. Los pocos funcionarios que tienen oportunidad de frecuentarla aseguran que en la intimidad la Presidenta suele hacer gala de buen humor. Verdad o no, algo de eso pudo verse la semana pasada, en el acto en Gobernador Gregores, en Santa Cruz, un encuentro con expectativa previa porque se esperaba que la Presidenta dijera algo sobre la vuelta de los fondos de la provincia. El anunciador, exaltado, la presentó y proclamó que era la primera vez que un presidente visitaba esa localidad, de apenas 2500 habitantes. Cristina agarró el micrófono y cuando todos aguardaban el esperado anuncio, ella se acordó de su marido. “Es para Kirchner que lo mira por TV, entonces”, lanzó-
Los pasillos de la Legislatura porteña y del Palacio de Gobierno se vieron despoblados esta semana. El jefe de Gobierno Mauricio Macri volvió a sus viejos hábitos y viajó al interior con sus hijos, aunque no quiso decir a dónde. Lo siguieron en su escapada de Semana Santa la vicejefa Gabriela Michetti, el vicepresidente primero de la Legislatura, Diego Santilli, y varios de los legisladores PRO, como Martín Borrelli, que huyó tempranamente el miércoles. También aprovecharon para descansar los diputados de la Coalición Cívica Sergio Abrevaya y Enrique Olivera, que eligió ir al campo, cerca de Luján. Con riesgo de ser acusados de workaholic, se quedaron el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, y el secretario general Marcos Peña-
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux