La velocidad o la lentitud en implementar una medida, el tiempo que se demora en cumplir una promesa, son decisiones políticas. El ejemplo más claro de esa definición de prioridades, por acción u omisión, es el anuncio oficial sobre la inminente creación de la Subsecretaría de Desarrollo Agropecuario y Agricultura Familiar. El Gobierno confirmó que se creará esa nueva estructura –un viejo reclamo de la Federación Agraria Argentina– el último lunes. El anuncio lo hizo el ministro de Economía, Martín Lousteau, desde el atril del Salón Blanco. El secretario de Agricultura, Javier De Urquiza, había prometido lo mismo hace cinco meses, luego de aquel recordado incidente en que De Urquiza se retiró del palco de la Exposición Rural de Palermo. El borrador del decreto que creará la subsecretaría está a la firma de Lousteau.

El Gobierno esperará una semana para firmar la resolución: primero se reunirá con las cuatro entidades ruralistas que impulsaron el lockout. En lo que no hay ninguna tardanza es en la puja por dirigir la nueva estructura. En la Casa Rosada se mencionan cuatro candidatos para ocupar la subsecretaría. Dos de ellos parecen tener más posibilidades y, obviamente, compiten entre sí. Se trata del ex representante de la provincia de Buenos Aires en el directorio del Mercado Central, Ricardo Angelucci, y el ex director regional Patagonia Sur del INTA, Carlos Paz, hoy virtual número 2 del secretario De Urquiza.

Los otros dos que completan la lista de postulantes son el ex secretario de las Ligas Agrarias Osvaldo “Quique” Lovey, actual interventor del Instituto de Colonización de la provincia del Chaco, y el ex diputado nacional por Jujuy Rubén Daza, hoy asesor en temas agrarios del gobernador riojano Luis Beder Herrera.

Angelucci tiene buena llegada al diputado Felipe Solá y también al jefe de Gabinete, Alberto Fernández. Paz es un pingüino alineado con el santacruceño De Urquiza. La definición a favor o en contra de Angelucci o Paz tendrá repercusiones dentro de una de las internas más duras que recorre al Gabinete: la que enfrenta al jefe de Gabinete con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Sucede que Angelucci no es desconocido para el funcionario de modales rudos que instaló todo un estilo de intervención en el mercado.

A mediados del año pasado, Angelucci renunció a su cargo tras denunciar que el entonces titular del Mercado Central, Fabián Dragone, no había hecho nada para erradicar amenazas, prácticas comerciales espurias y control monopólico de precios. Dragone estaba ligado a Moreno; incluso había instalado su cuartel general en la Secretaría de Comercio Interior, Diagonal Sur al 600. Al momento de las críticas, Angelucci había tenido un aval explícito de Solá, entonces gobernador.

Ahora también tendría el apoyo de Solá para desembarcar en la flamante Subsecretaría de Desarrollo Agropecuario. Angelucci se habría asegurado, además, la aprobación del jefe de Gabinete. Paz es un hombre vinculado a De Urquiza y cuenta con un antecedente de mucho valor para el kirchnerismo: proviene del sur de la Patagonia, lo que equivale a ser considerado tropa propia. La puja entre Angelucci y Paz por desembarcar en la nueva estructura podrá ser interpretada como otro capítulo de la pelea entre los tándem Fernández/Lousteau versus Moreno/De Vido.

Con menos padrinazgos influyentes, Lovey y Daza también tienen chances de ser designados en la subsecretaría. Experimentado en la problemática rural, vecino de la ciudad de Machagai, Lovey fue uno de los dirigentes campesinos más buscados por la dictadura en toda la región del NEA: durante años vivió clandestino en el monte chaqueño. Logró sobrevivir gracias a la ayuda de los pobladores rurales de la zona. En las últimas horas, el gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, recibió varias llamadas desde el primer piso de la Rosada. Le preguntaron por las condiciones de Lovey para ser funcionario nacional.

Entre los pergaminos de Daza figura su condición de pionero del kirchnerismo en el norte del país. Ex vicegobernador de Jujuy, Daza fue uno de los primeros dirigentes en apoyar la candidatura presidencial de Néstor Kirchner. Hace unos meses su figura tenía el consenso de la Federación Agraria para ocupar la Subsecretaría. Hoy sus chances parecen haber caído tras el enfrentamiento de la Rosada con Eduardo Buzzi pero en estas cuestiones nunca se sabe.