Desde las ocho de la mañana de hoy los cordobeses podrán decidir –firma mediante– la destitución o la continuidad de Germán Kammerath al frente de la Municipalidad de Córdoba. Si en el plazo de un mes se reúnen por lo menos 87 mil firmas, la Junta Electoral municipal convocará a un referéndum vinculante para votar si el intendente se va o se queda. Mientras tanto, en el entorno del ucedeísta especulan con que el Tribunal Superior de Justicia conceda el recurso extraordinario ante la Corte Suprema, ya que esto podría suspender la recolección de firmas.
El proceso de revocatoria se inició a fines de julio, cuando se dio lugar a la presentación de un abogado local, Carlos Bellotti, quien acusó al intendente por mal desempeño de sus funciones, luego de tres años de una gestión en los que no consiguió concretar ninguno de los proyectos prometidos y sólo sembró sospechas sobre la mayoría de las concesiones que encaró. A tal punto Kammerath le teme a la decisión de la ciudadanía, que instruyó a sus colaboradores para que apuraran el juicio político que a la vez se tramita en su contra en el Concejo Deliberante, y que podría parar la revocatoria.
Por decisión de la jueza electoral municipal, 162 empleados se ocuparán de supervisar las firmas en los 29 lugares dispuestos en toda la ciudad y que funcionarán durante 30 días corridos de 8 a 20. Todo aquel que quiera firmar deberá presentarse con su documento de identidad y llenar un formulario. Es necesario el 10 por ciento del padrón –87 mil firmas– para que tenga lugar la consulta popular, al modo de un acto eleccionario obligatorio y tradicional.