Llegó la hora de sumar peronistas y la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, también quiere aprovechar el momento. En el Instituto Hannah Arendt, Lilita recibió a un grupo de ciento cincuenta dirigentes peronistas entre los que estuvieron los ex grupo Talcahuano Gerardo Conte Grand y Ricardo “Lolo” Gómez, quien se incorporó oficialmente a la CC. Con la imagen de Evita y Perón de fondo, Carrió les dijo que nunca fue antiperonista y que su padre, Gennaro Carrió, tenía muchos amigos peronistas, como Deolindo Bittel. Además, contó que en la dictadura le tuvo que ceder su pieza a un dirigente peronista que salió de la cárcel con libertad vigilada. Carrió propuso, además, “volver a la movilidad social que llevó adelante el justicialismo en sus primeros gobiernos”. La dirigente opositora destacó que “una bandera central de la Coalición Cívica la realización de la justicia social”. Al encuentro no asistieron otro grupo de peronistas que se habían acercado a Carrió vía Patricia Bullrich, como los ex menemistas Moisés Ikonicoff y Aníbal Leguizamón.
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