Carlos Menem apenas estuvo ayer media hora en el juzgado de Norberto Oyarbide. No fue mucho tiempo, aunque al ex presidente le resultó suficiente para negarse a declarar sobre las cuentas que supuestamente tiene en Suiza y a la menemista “Brigada Antiescraches” le sobró para agredir a varios periodistas que hacían su trabajo en la puerta de los tribunales de Comodoro Py. Las víctimas de la fuerza de choque que acompaña a Menem a todas partes por si acaso se encuentra con manifestaciones en su contra fueron varios reporteros gráficos y un camarógrafo de televisión. Como consecuencia de la agresión la policía detuvo a un menemista y la investigación del caso quedó en manos del juez en lo correccional Raúl García. La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) y la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (Utpba) repudiaron el ataque y exigieron a las autoridades la sanción de los agresores.
Los seguidores de Menem llegaron temprano a los tribunales de Retiro, a eso de las siete de la mañana, y se apostaron en la puerta a la espera de su llegada para declarar ante Oyarbide. No eran mucho más que cincuenta y hasta ahí todo parecía tratarse de una manifestación de apoyo al ex presidente. Varios lucían remeras con la leyenda “Menem 2003” y no faltaron los bombos ni los redoblantes sonando hasta el hartazgo. El grupo contaba, además, con el apoyo de una camioneta con altoparlantes, que alternaba el nuevo hit bailantero de campaña menemista “Que vuelva Carlos” con una versión remozada del tango “Te acordás hermano”, especialmente adaptado para la ocasión con estrofas del tipo “Te acordás hermano, cuando había crédito, no había inflación, no existía el corralito y el dinero tenía valor”.
Todo cambió, sin embargo, cuando apareció el auto en el que Menem se trasladó hasta Comodoro Py. “Por lo general, cuando ves aparecer el coche tratás de acercarte al vidrio para tratar de hacer alguna foto, pero esta vez se vinieron estos tipos al humo y no nos dejaron”, relató el fotógrafo de la agencia Noticias Argentinas a Página/12.
Vides recibió varios golpes en su cara y su flash terminó roto. También fueron golpeados los reporteros gráficos Fernando Massobrio (La Nación), José Romero (Crónica) y Enrique García Medina (quien suele colaborar con este diario) y un camarógrafo de Crónica TV. García Medina aseguró que una activista menemista, rubia y vestida de jogging, en medio de la golpiza, lo amenazó verbalmente al grito de “tomátela (sic) porque te matamos”.
El titular de la comisaría 46, Carlos Gorosito, confirmó la detención de una persona, a la que definió como “un simpatizante menemista” con “un corte en la cara”. En su declaración, el seguidor de Menem denunció haber sido agredido por un ayudante de cámara de Crónica TV y atribuyó a eso el comienzo de los incidentes. Los periodistas dieron otra versión de los hechos: dijeron que fue el menemista quien, junto a otros dos o tres, los habían atacado cuando los reporteros intentaron tomar las imágenes de la llegada de Menem a los tribunales de Retiro.
“Los agresores actuaron de manera organizada, distribuyéndose el papel de impedir, uno por uno, el trabajo de los hombres de prensa con una metodología calculada premeditadamente, según denunciaron los afectados”, destacó Adepa y pidió que se castigue a los responsables del ataque. Lo mismo reclamó la Utpba y advirtió que la agresión no sólo constituye “un atentado contra el ejercicio de la profesión sino contra el conjunto de la sociedad, al vulnerar su derecho a informarse y ser informada”.