Todo bien. Así terminó el primer encuentro entre el ministro del Interior, Florencio Randazzo, y el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, luego de que éste se distanciara del gobierno nacional por no compartir la postura oficial frente al lockout de las entidades agropecuarias. Ministro y gobernador calificaron la reunión como “muy positiva”. Puertas adentro, según pudo saber PáginaI12, Schiaretti expresó su vocación de realinearse con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y Randazzo le prometió ayuda frente al déficit de la Caja de Jubilaciones de Córdoba.

Aunque al principio se miraban con cierta desconfianza, cuando lograron el clima para los sinceramientos, Randazzo y Schiaretti acordaron seguir trabajando en conjunto para ir eliminando viejos recelos. Palabras más, palabras menos, Randazzo le dijo que el Gobierno le iría dando pruebas de amistad pero que esperaba de él conductas recíprocas, compromiso que aceptó el gobernador cordobés.

La reunión se extendió por una hora ayer a la mañana en el despacho de Randazzo y durante un tramo participó el titular de la Anses, Amado Boudou, quien tiene la llave operativa para ir en socorro de la caja previsional cordobesa, la necesidad más urgente de Schiaretti, ya que como no le cerraban los números envió a la Legislatura provincial un proyecto de ley para recortar las jubilaciones y provocó una violenta protesta de los empleados estatales.

Al término del encuentro, Randazzo sostuvo que con Schiaretti acordaron “avanzar en normalizar la relación institucional” entre la Nación y la provincia y resolvieron además la creación de una comisión que durante 90 días analizará la situación de la Caja de Jubilaciones provincial.

“La reunión ha sido muy positiva y hemos avanzado en normalizar la situación institucional, que en algún momento parecía alejada. Esa relación, para nosotros, nunca fue alejada en cuanto a la gestión, porque aquellas cosas que están en marcha en Córdoba son preocupación no sólo de los cordobeses sino también del gobierno central”, dijo el ministro del Interior.

Más tarde, desde Córdoba, Schiaretti señaló que Randazzo le “manifestó la voluntad de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de que la relación institucional sea positiva, y yo creo en esa voluntad, porque los resultados que hemos obtenido por ser la primera reunión son altamente positivos”.

La reunión se enmarca en la decisión del gobierno nacional de volver a construir vínculos con algunos de los dirigentes del oficialismo que se habían alejado durante el conflicto con las cámaras de productores. La actitud de Schiaretti, dado su rol de gobernador de una de las provincias más importantes, había golpeado al Gobierno. En su momento no sólo se solidarizó con los empresarios rurales, sino que mandó a los diputados que le responden a votar en contra del proyecto oficial sobre retenciones móviles. Más tarde, acusó al Gobierno de no enviarle fondos que necesitaba para la Caja de Jubilaciones.

Pese al acercamiento, Boudou ayer insistió que “no hay un reclamo válido” de la provincia. Igual señaló que si Córdoba “cumple los requisitos que pide la Anses y se acerca a los parámetros nacionales se puede consensuar un plan de acompañamiento para los próximos cuatro años”.

Pero no sólo de compromisos políticos y cajas jubilatorias hablaron Randazzo y Schiaretti. También se habló de un aporte de la Nación de 400 millones de pesos para refinanciar parte de las deudas de Córdoba que suman 1046 millones de pesos y que vencen en los próximos meses. Además, Randazzo informó que “el 9 de septiembre próximo la Presidenta va a firmar la adjudicación del último tramo, entre Leones y Tortuguitas, de la autopista Rosario-Córdoba, que estará finalizado antes del Bicentenario”.

Por último, Randazzo afirmó que “se han transferido fondos para la ampliación de planta de generación eléctrica de Pilar y la finalización de la planta Manzanares, en Río Cuarto”. Lo que fue ratificado por Schiaretti, al señalar que “la Nación nos ha girado 28 millones de pesos para que se continúen los trabajos de repotenciación de la planta de Pilar, que es vital para la generación de energía en Córdoba”.