Los docentes porteños convocaron a un paro de 48 horas para el miércoles y jueves de la próxima semana. Los 17 gremios decidieron la medida de fuerza luego de la reunión que mantuvieron con funcionarios del Ministerio de Educación. El encuentro duró menos de 5 minutos porque el oficialismo se negó a tratar el principal reclamo de los maestros: la recomposición salarial del 20 por ciento retroactiva a agosto de este año. Ante el rechazo gubernamental, los gremialistas abandonaron la instancia de negociación. El ministro Mariano Narodowski, como de costumbre, no estuvo presente en el fracasado diálogo que tuvo como vocero oficial al segundo de la cartera educativa, Walter Bouzada.

El paro, quinto en el año, incluirá el primer día una movilización a partir de las 11 de la mañana desde Chacabuco y Avenida de Mayo hasta la Jefatura de Gobierno. La medida de fuerza es un capítulo más del prolongado conflicto que el sector educativo, en su totalidad, mantiene con la administración Macri, y que parece, por lo menos por ahora, no arribar a una solución.

Voceros de Narodowski manifestaron a PáginaI12, que “el gobierno ya estableció un presupuesto este año para el sector educativo que no puede ser modificado”, por lo que “toda asignación presupuestaria como la que exigen los sindicatos es imposible”. Según la misma fuente, hacen falta “340 millones de pesos para el aumento que se pide y no 20 como dicen los gremios”. A diferencia de lo que ocurrió en otras jurisdicciones, las autoridades porteñas no admiten siquiera la posibilidad de empezar a discutir una recomposición.

Roberto “Tito” Nenna, secretario general de UTE-Ctera, aseguró a este diario que el gobierno “destruyó la posibilidad de resolver el conflicto”, al tiempo que “agudizó la situación con su actitud autoritaria e irracional, que es incompatible con el fortalecimiento de cualquier instancia de diálogo”. Nenna agregó que “prima el criterio empresarial y el mismo desconocimiento de la administración pública que existió en los ’90”.

Antes de la reunión, referentes gremiales de UTE-Ctera acudieron al Congreso, donde se reunieron con un grupo de diputados de partidos opositores al macrismo. Los legisladores les manifestaron su apoyo al reclamo del sector y luego declararon su “preocupación” por la crisis educativa y exigieron una respuesta por parte del gobierno porteño. Los firmantes fueron Vilma Ibarra, Claudio Lozano, Claudio Morgado, María América González, Roy Cortina, Delia Bisutti, Miguel Bonasso, Jorge Coscia y Silvina Giúdici. Los docentes se encontrarán esta tarde con los senadores María Eugenia Estenssoro, Samuel Cabanchik y Daniel Filmus. Por su parte, Enrique Olivera, presidente de la Comisión de Educación de la legislatura de la ciudad e integrante de la Coalición Cívica, afirmó que “es necesario establecer las condiciones necesarias para un diálogo urgente y fecundo”.