Luego de los cambios dispuestos por la presidenta Cristina Kirchner en la Superintendencia de Salud, la ministra Graciela Ocaña sostuvo que se siente “respaldada por el gobierno nacional”. “La política debe hacerse por la gente, no es una disputa personal. Los recursos de salud deben ir a los sectores que más lo necesitan”, agregó Ocaña, que ayer viajó a Santa Fe y visitó junto al gobernador Hermes Binner el Laboratorio Industrial Farmacéutico. El miércoles, mediante un decreto, la Presidenta reemplazó a cuatro hombres de la Superintendencia de Salud que respondían a Héctor Capaccioli por otros de confianza de Ocaña. De esta manera, zanjó la disputa interna que ambos funcionarios venían manteniendo desde tiempo atrás.