La Facultad de Ciencias Económicas de la UBA celebró sus 95 años de vida en el marco de una semana de actividades tanto conmerativas como de reflexión sobre las problemáticas que atraviesa su comunidad académica. La jornada finalizó ayer con un acto, en el salón principal del edificio de la avenida Córdoba, que contó con la asistencia de referentes de todo el espectro universitario y que tuvo como principal orador al decano Alberto Barbieri. Se homenajeó a ex autoridades de la institución y el broche de oro fue una conferencia del último Premio Nobel de Economía, el estadounidense Eric Maskin. Los festejos coincidieron con el comienzo de las obras de una nueva ala del establecimiento que se extenderá hasta llegar a la calle Junín.

Participaron decanos de otras facultades de la UBA, entre ellos, Federico Schuster de Sociales, Alfredo Buzzi de Medicina, y el secretario general de la UBA Carlos Mas Vélez, así como docentes y administrativos de la casa, graduados y un reducido grupo de alumnos, en su mayoría de Nuevo Espacio, agrupación que conduce el centro de estudiantes.

El acto comenzó con un Power Point que recorrió en imágenes la historia de la facultad, sus avances y retrocesos, al compás de los del país, hasta llegar a estos días. Luego pasó al atril la consejera estudiantil, Maira Trujanovich, que halagó a la gestión actual y reclamó “más presupuesto del Gobierno para mejorar las condiciones edilicias”. Acto seguido, le tocó el turno a María Insa, de graduados, que enfatizó el rol de la universidad pública que “nos da todo sin pedirnos nada a cambio”, al tiempo que alabó al decanato porque “mantuvo e, incluso, aumentó el prestigio de nuestra querida casa de estudios”.

El decano Barbieri, por su parte, realizó una suerte de reflexión del presente de la facultad, al tiempo que recordó hitos que “marcaron el desarrollo de nuestra academia”, como la “creación del plan de estudios de las carreras de economía y administración, hace 50 años”. En cuanto a lo que sucede hoy día, Barbieri aseguró que “la actualidad académica es muy positiva. La economía es una ciencia social, por eso transmitimos a los estudiantes que los lazos con nuestra sociedad solo pueden darse a partir de un compromiso ético sostenido en el conocimiento que adquiere el alumno”. Como buen economista, Barbieri esgrimió algunos datos estadísticos para sostener su visión: “60 mil estudiantes de grado, cinco carreras, tres mil alumnos de posgrado, dos institutos de investigación, el Centro Cultural Sabato, cientos de convenios y pasantías tanto con el sector privado como con el público y una fructífera relación con universidades extranjeras”. Aprovechó también para agradecer “la colaboración del Ministerio de Planificación de la Nación” en la ampliación que extenderá el edificio a donde, hasta hace poco tiempo, había un estacionamiento.

Luego llegaron los homenajes, momento en que se vivió una situación llamativa. Entre los presentes estaba el ex rector radical de la UBA en los años menemistas Oscar Shuberoff, que en su carácter de ex decano recibió una medalla que fue acompañada de estruendosos aplausos por una parte importante de los presentes. Cuando PáginaI12 consultó a Barbieri sobre el motivo de la distinción, dijo que “fue invitado en su carácter de ex decano, en tiempos democráticos, de esta facultad y porque más allá de las diferencias, creemos en la pluralidad fervientemente”.

Informe: Tomás Forster.