Finalmente, Raúl Alfonsín se convirtió en el autor intelectual de la reunificación de la Unión Cívica Radical. La propuesta que hizo el ex presidente será la que buscarán aprobar los radicales en la Convención Nacional para hacer las pases con el sector que lidera Julio Cobos. Poco después del voto no positivo, Alfonsín había recibido al vicepresidente y allí le contó su idea: que le levanten la expulsión “de por vida” pero que se tome licencia como afiliado hasta que culmine su mandato. Ese plan fue madurando entre los que más resistencia ponían al regreso de Cobos hasta que las masivas manifestaciones por la muerte del ex presidente terminaron de convencerlos.

Luego de postergarse por el fallecimiento de Alfonsín, la Convención fue reprogramada para el próximo 17 y 18 de abril, en la ciudad de Mar del Plata. Ayer, una vez confirmada la fecha, Cobos anticipó que aceptará la invitación realizada por el presidente del partido, Gerardo Morales. Algunos de los hombres de confianza del vice, como el intendente de Junín, Mario Meoni, y el diputado Daniel Katz lo acompañarán en aquel encuentro.

“Posiblemente se trate un pedido de levantamiento de la sanción a Cobos y una licencia mientras dure el ejercicio de su cargo, que era la propuesta que había hecho Alfonsín”, reconoció ayer Morales, uno de los que más se había opuesto a su reincoporación. De todas maneras, Morales aclaró ayer que Cobos no podrá ocupar cargos partidarios hasta concluir su mandato. Dijo que “no se habló de este tema” y sostuvo que “va a ser muy complicado que pueda presidir el partido” en el mediano plazo.

“Vamos a intentar cumplir con una de las obsesiones que tenía Raúl en cuanto a reunificar el partido, y la situación de Cobos es central”, explicó el titular del radicalismo. En consonancia, el vicepresidente recordó ayer que la última vez que visitó a Alfonsín él le pidió que hicieran “todos los esfuerzos” para normalizar el partido.

Antes de que se invitara a Cobos a la Convención, el radicalismo ya había hablado con Elisa Carrió y con Rubén Giustiniani para que formen parte del cónclave, en calidad de invitados y como representantes de las fuerzas aliadas. Por el momento, la situación se mantiene y es probable que los líderes de la Coalición Cívica y del socialismo sean parte del encuentro.

Sin embargo, la reciente invitación a Cobos le provocó cierta incomodidad a Lilita. Cerca de ella explicaron que le genera dudas que el vicepresidente de la Nación participe en un acto junto a “la principal referente de la oposición”. “No hay ningún problema con Cobos en sí, el tema es el cargo institucional que ocupa”, dijeron fuentes de la CC. En esa fuerza consideran que mientras esté en el cargo el vice no debería ser parte de un partido opositor. De todas maneras, aclararon que se trata de una decisión que le correponde al radicalismo y que no se involucrarán en el tema.

En la UCR, en cambio, se entusiasman con una foto que incluya a Carrió, Cobos, Giustiniani y Morales. Pero los reparos de la líder de la CC complicarían su realización. Más allá de esas diferencias, se impondrá el mensaje de unidad hacia adentro de la UCR. Morales y el titular de la Convención, el ex senador Hipólito Solari Yrigoyen –los máximos responsables de la expulsión del vice- compartirán escenario con el ex gobernador mendocino.

Más allá de las muestras de unidad y la reconciliación, todavía no está definido cómo se hará la reincorporación de los cobistas a la UCR. Por el momento, el vice mantendrá la estructura de su partido Consenso Federal, que no va a fusionarse con la UCR en las próximas elecciones. En las legislativas, la unidad será a través de un frente electoral que involucre a los distintos partidos. Los hombres más cercanos al vice reconocen que se trata de una “transición” y que finalmente terminarán todos nuevamente bajo el paraguas radical. Esa, anticipan, será otra batalla.