El juez de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti fue reelegido por sus colegas para ocupar hasta diciembre de 2012 la presidencia del tribunal. En la vicepresidencia seguirá, como hasta ahora, Elena Highton de Nolasco. Así fue resuelto en una acordada que firmaron el martes último cinco de los siete jueces supremos.

Lorenzetti es uno de los ministros nombrados en la Corte durante el gobierno de Néstor Kirchner, después de la disolución de la vieja mayoría automática menemista. Santafesino, de Rafaela, llegó al tribunal sin haber tenido cargos previos en la Justicia. Es profesor de Derecho Civil en varias universidades, miembro de la Academia Nacional de Derecho y amante del derecho ambiental y del consumidor. Su primera presidencia entre los supremos comenzó en 2006 y su nuevo mandato se iniciará en enero de 2010. Highton fue la primera mujer nombrada –también por Kirchner– en el tribunal supremo. Venía de la Cámara Civil, con la mediación como una de sus especialidades.

En el tiempo que lleva al frente de la Corte Lorenzetti se ganó, entre sus colegas, fama de conciliador. Fomentó, además, una política de apertura de la Corte hacia la sociedad a través de la divulgación de sus sentencias y la realización de audiencias públicas en casos de interés para la comunidad. Durante su primera presidencia, el tribunal firmó fallos de gran trascendencia como el que anuló los indultos, el que ordenó la limpieza del Riachuelo, el que indicó el ajuste de las jubilaciones (conocido como caso Badaro), otro que ratificó la doctrina de la real malicia en casos de libertad de expresión y resolvió las causas pendientes sobre el corralito y la pesificación, entre otras.

El año pasado impulsó un pronunciamiento para priorizar y acelerar los juicios sobre violaciones a los derechos humanos durante la dictadura. También es promotor de la búsqueda de una solución a las causas de los jubilados. Es crítico del Consejo de la Magistratura, donde le gustaría recuperar un lugar para el máximo tribunal. Highton fue una fuerte impulsora de la creación de la Oficina de violencia doméstica. El martes la dupla Lorenzetti-Highton fue reelegida por sus colegas. Sólo Enrique Petracchi se abstuvo de votar.