El macrismo quedó en minoría en todas las comisiones de la Legislatura. Sin embargo, consiguió aliarse con un sector de la oposición y retuvo seis de las comisiones estratégicas. Debió ceder la vicepresidencia segunda, que quedó en manos de Julio Raffo, de Proyecto Sur; y la tercera, que fue para Sergio Abrevaya, de la Coalición Cívica. Tanto la líder de la CC, Elisa Carrió, como Pino Solanas apoyaron la iniciativa para que la oposición obtuviera la mayoría de las presidencias de las comisiones, pero se abrieron el kirchnerismo, el PJ y otros sectores del Acuerdo Cívico.

Entre cantos de militantes de la CTA que fueron y bombos de los peones de taxi que respaldaban a Claudio Palmeiro, juraron los nuevos legisladores. Los acompañaron también los diputados nacionales Pino Solanas, Claudio Lozano, Liliana Parada y Graciela Iturraspe, además de Patricia Bullrich. Las autoridades fueron elegidas por 59 legisladores, con la abstención de la de Nueva Izquierda Patricia Walsh: la vicepresidencia primera quedó para el macrista Oscar Moscariello, mientras que los opositores obtuvieron las otras dos: la segunda la ocupó Julio Raffo y la tercera, Sergio Abrevaya. “Proyecto Sur no va a juzgar los proyectos por quién los cree. Veremos los contenidos. Esa flexibilidad tiene su límite: el de los principios”, sostuvo Raffo, que quedará a cargo de la Legislatura cuando Macri viaje y Moscariello asuma como jefe de Gobierno. Fueron designados como secretario parlamentario Carlos Pérez y como secretario administrativo Pablo Squilaggi. El lilito Facundo Di Filippo será el secretario de Coordinación.

Las horas previas fueron de intensas negociaciones para definir la conformación de las autoridades y de las comisiones. Los macristas pretendían ocupar también la vicepresidencia segunda, que debieron ceder en la negociación. Los ibarristas, Proyecto Sur y la CC habían formado un frente para dejar al macrismo en minoría en todas las comisiones y obtener varias de las estratégicas. Pero los macristas operaron sobre las internas de la oposición y, a último momento, cerraron un acuerdo con el PJ y los kirchneristas. Lilita mantuvo a sus legisladores alineados con la oposición, pero se abrieron los radicales y socialistas.

“Tenemos 36 votos, si hace falta”, se ufanó uno de los negociadores PRO. Los opositores amenazaron, por su parte, con hacer un escándalo en la sesión. Finalmente, llegaron a un acuerdo en el que los macristas quedaron en minoría, pero retuvieron las presidencias de seis de las diez comisiones estratégicas: Asuntos Constitucionales, Educación, Justicia, Obras Públicas, Presupuesto y Seguridad. Perdieron las comisiones de Salud y Tránsito. En tanto, dividieron la Junta de Etica: una parte seguirá en manos del radical PRO Oscar Zago y habrá una comisión de organismos de control, que presidirá Martín Hourest. El PRO también obtuvo las presidencias de Promoción Social y Legislación General, que se escindió en dos comisiones: la de Trabajo fue para los opositores. En total, el macrismo conservó las presidencias de catorce comisiones de las 26.

Proyecto Sur obtuvo las comisiones de Salud, Descentralización, Trabajo y Tercera Edad y el ibarrismo se quedó con Cultura, la Comisión de Seguimiento de Salud Mental y Deportes y Turismo. Ambos espacios avanzan para formar un interbloque. El Acuerdo Cívico tendrá la presidencia de las comisiones de Vivienda, Mujer, Asuntos Interjurisdiccionales y Desarrollo Económico. El interbloque lo coordinarán los presidentes de las fuerzas: Fernando Sánchez (CC), Claudio Presman (UCR) y Julián D’Angelo (PS). “Cambió la lógica de la Legislatura. Ahora depende de la oposición marcar la agenda”, sostuvo Sánchez. El bloque del PJ consiguió Tránsito (la presidirá Palmeiro, de los taxistas), mientras que Planeamiento seguirá presidida por Silvina Pedreira. El kirchnerismo tendrá las comisiones de Derechos Humanos e Igualdad de Trato. Al bloque K, que conducirá Juan Cabandié, se incorporó la ex ibarrista Gabriela Alegre.