Departamentos y comercios sin luz, semáforos fuera de servicio, autos arruinados por el agua, negocios cerrados, barreras en mal funcionamiento, agua todavía dentro de las propiedades y vecinos sacando la basura y el líquido que quedaba en los interiores, con pequeños motores o en forma manual. Esas eran algunas de las consecuencias que ayer por la tarde evidenciaban el desastre que provocó el temporal sobre la ciudad de Buenos Aires. Las marcas de agua en las paredes de los edificios porteños eran prueba contundente de una lluvia que en tan sólo tres horas arrojó 88,5 milímetros y dejó inundada a gran parte de la ciudad y sin luz a más de cien mil familias. La falta de energía eléctrica fue uno de los problemas más extendidos. Anoche, vecinos y comerciantes de Caballito cortaron la avenida San Martín al 1400 e hicieron un cacerolazo para manifestar que hacía 24 horas estaban sin luz. En la madrugada de hoy, había cortes y fogatas por el mismo motivo en Yatay y Rivadavia y Avellaneda y Rojas.

Diversos barrios porteños continuaban en el caos que dejó uno de los temporales más grandes que azotó a la ciudad en los últimos años. Zonas en las que no son habituales las inundaciones las padecieron sorpresivamente. Patricia es empleada de una casa de pastas del barrio de Villa Crespo, ubicado en la esquina de Darwin y Velazco: “La verdad es que tengo abierto para liquidar lo que quedó. El agua subió a más de un metro y se perdieron muchísimas cosas”. Es que la lluvia arrasó con mercadería y todo tipo de artefactos eléctricos. Ayer por la tarde las heladeras y los freezers continuaban flotando en el depósito del local y también mucha mercadería. Para sacar el agua estancada, la mujer debió pedir prestado a un vecino un motor y conectarle una manguera, para que lentamente se pudiera ir desagotando a la calle. Ese mismo sistema de desagote fue empleado por varios inmuebles de la zona, que intentaban sacar el agua que aún se encontraba en el interior. Ese es el caso de un edificio ubicado sobre Godoy Cruz al 1500, donde empleados de la administración tra-bajaban en extraer los 60 centímetros que inundaron del sótano.

Las huellas del temporal podían verse en Palermo, Almagro, Belgrano, Caballito, Flores, La Paternal, Villa Crespo, Liniers y sectores del conurbano, como Avellaneda y la zona norte. Con calles inundadas y semáforos sin funcionar en varios puntos de la ciudad hasta ayer a la noche, la avenida Juan B. Justo no fue la excepción, ya que sobre esa arteria el tránsito se complicaba por la falta de señalización eléctrica.

Ayer y durante todo el día la ciudad intentó normalizar su actividad. Los colectivos procuraban regularizar su servicio, demorado por los problemas de circulación y la sobrecarga de pasajeros dado que el subte había dejado de funcionar durante las primeras horas. También fueron afectados los accesos a la ciudad. En la autopista Panamericana hubo atascamientos de más de 10 kilómetros y se produjo el vuelco de un camión. Los puentes Uriburu, Pueyrredón y Avellaneda fueron cortados algunas horas porque sus extremos quedaron bajo el agua.

Los vehículos también fueron blanco de la inundación. Muchos de ellos quedaron bloqueados y literalmente arruinados cuando el agua se metió hasta llegar a sus motores y estropearlos. “El agua llegó a tapar el volante del auto. Antes de que se largara fuerte lo puse sobre una vereda alta, pero no hubo caso. El motor se arruinó igual”, decía Juan Carlos, un vecino de La Paternal que ayer alrededor de las 19 intentaba limpiar y rescatar lo que quedaba de su vehículo. La imagen recurrente, que se repitió durante la mañana de ayer y se extendió en algunos lugares entrada la tarde, fue la de los vecinos que con secadores y baldes buscaban despejar sus viviendas o comercios.

En algunos barrios, como el de La Paternal y Villa Crespo, ni la luz domiciliaria ni la del alumbrado público funcionaban. En repudio de un extenso apagón, vecinos de la avenida San Martín decidieron cortar el tránsito en reclamo de una solución urgente. También hubo cortes eléctricos de variada duración en el centro, Flores, Palermo, Belgrano, Almagro y Parque Chacabuco, que se fueron solucionando a lo largo del día.

Informe: Rocío Ilama.