Christian Gribaudo se fue, como de costumbre, a su casa en Mar del Sur. Pero, por el conflicto del Banco Central, acortó sus vacaciones y se volvió. Aún bronceado, el diputado es uno de los pocos dirigentes del PRO que puede decir sin problemas: “No me hace ningún ruido que Francisco de Narváez sea candidato a presidente”. Sobre el conflicto del Banco Central, el diputado incluso asegura que el Gobierno va “a ir por lo que tenga guardado cada uno donde lo tenga”.

–¿Unión-PRO tiene posibilidades de continuar?

–Se planteó un acuerdo electoral con la posibilidad de trabajar juntos en un proyecto político. El desafío es transformar algunas de las patas en un proyecto común. Es distinto el caso de De Narváez al de Solá. Hay más distancia tal vez con lo que trabaja hoy Felipe. En cambio, Francisco trabaja muy cerca del PRO en la Cámara de la provincia de Buenos Aires y en los concejos deliberantes. En esos acuerdos, no está Felipe.

–Pero en el Congreso, De Narváez se fue del bloque de PRO.

–En el Congreso, el tema de que exista un bloque del Peronismo Federal aglutina por origen. A mí me encantaría estar en el mismo bloque que Francisco, obviamente. En algún momento, eso va a confluir.

–¿Las aspiraciones presidenciales de De Narváez complican un acuerdo?

–No, no. Sería escaso para un dirigente ponerse un techo. Un dirigente de peso como lo es De Narváez que no tenga aspiraciones presidenciales suena casi a no ser dirigente. Le acaba de ganar a Kirchner en la provincia. No me hace ningún ruido que Francisco sea candidato a presidente o quiera serlo. Además, hay una realidad: mide muy bien a nivel nacional.

–¿Más que Macri?

–En algunas encuestas, mide más. En otras, mide igual. No tiene gestión y puede trabajar tranquilamente recorriendo el país y es muy bien recibido. Lo acompañé a Mendoza y no podíamos caminar por la calle.

–¿Los dos son una opción para Unión-PRO?

–Son opciones para electorados parecidos. Francisco se acerca a un electorado independiente y menos relacionado con la política, pero también tiene inserción en el peronismo.

–¿Cuál escenario prefiere?

–Que lleguen con excelente imagen Francisco, Mauricio y, si puede, también Felipe.

–En ese caso, ¿lo preferiría a Macri de presidente o a De Narváez?

–Las dos opciones son interesantes.

–¿Es posible ganar sin el peronismo disidente?

–Por la reforma política, que beneficia a los partidos tradicionales, si Francisco va a la interna del PJ, tienen más chances. Y Mauricio va a tener que apurar su desarrollo territorial.

–¿Cuál sería la mejor figura para la ciudad?

–Gabriela Michetti claramente tiene una altísima chance, por su buena recepción con la gente. Los que están trabajando seriamente también son Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli. Ahora, Gabriela está hoy un escalón más arriba que el resto.

–¿Qué cuestiones de la gestión macrista habría que redefinir después de lo de Palacios, Ciro James y Abel Posse?

–Algunas cosas ya se redefinieron bien, como el nombramiento de Esteban Bullrich en educación y de Santilli. Y no es menor que esté hoy en la calle la Metropolitana. Antes de que saliera hubo cuestiones desafortunadas de la propia gestión y búsqueda de poner palos en la rueda tanto de la Federal como del gobierno nacional, pero hoy la gente ve que no es un eslogan de campaña. Además, hoy tenemos un ministro hablando con los gremios docentes y no un librepensador filósofo como Posse, que un poco más opina sobre lo que tenemos que hacer en el Congreso.

–¿Cómo planean derrotar a Cobos en 2011?

–A Cobos primero hay que ver si no lo derrota el radicalismo, donde lo están desgastando día a día.

–¿Cuál es su posición sobre el Fondo del Bicentenario?

–No podemos tocar las reservas para lo que pretende un funcionario. El Banco Central tiene que cuidar la política monetaria. Tienen que dejar la política de búsqueda de cajas y ser un país normal: dejar de pretender ser una monarquía y que el Indec funcione. Mañana, cuando le dejen de sacar a las reservas van a ir por lo que tenga guardado cada uno donde lo tenga.

–¿Usted dice que el Gobierno va a confiscar los ahorros?

–¿Hay seguridad en los bancos argentinos? ¿Por qué sale la plata al exterior? ¿Quién confía hoy en tener los ahorros en el banco? Muy pocos.