Desde Gualeguaychú

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La decisión de Uruguay de reforzar, desde el viernes, la seguridad en el paso fronterizo ante una posible avanzada de los ambientalistas hacia el país vecino marcó la jornada previa a la sexta marcha organizada por la Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú al puente Internacional General San Martín. Los manifestantes calificaron la medida como “ridícula” y la vincularon a una intención del gobierno oriental de “meter miedo” para minar la concurrencia. La de hoy será la primera manifestación masiva luego del fallo del Tribunal de La Haya y se realizará en medio del debate acerca de mantener o no el corte de ruta como método de protesta.

La tranquila tarde de la ciudad entrerriana transcurrió entre los últimos preparativos de la marcha que según los organizadores promete congregar a más de 80 mil personas, impulsadas por el descontento que generó el veredicto de la corte internacional de La Haya, que rechazó el reclamo por el cese de operaciones de Botnia. Hasta última hora de ayer, los ambientalistas se encontraban reunidos corrigiendo la proclama que leerán antes de finalizar la movilización convocada bajo el lema “Todos juntos por la vida. No a las papeleras”.

Según trascendió, la Asamblea Ciudadana leerá un texto con un alto contenido político en el que “habrá palos para todos”, anticipó a Página/12 el ambientalista Jorge Fritzler. El documento tendrá párrafos que cuestionarán duramente a Uruguay, y también incluirán críticas hacia los gobiernos nacional y provincial, además de exigencias para el Ejecutivo en la reconstrucción de la relación bilateral con el país vecino. Botnia y Finlandia obviamente también serán el blanco de las protestas.

“No hay peligro de enfrentamiento”, sostuvo Fritzler en relación al fuego cruzado que se generó en las últimas horas entre funcionarios del gobierno uruguayo y los asambleístas. Varios miembros del gobierno oriental, incluido el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, anunciaron que reforzarían la guardia en el puesto fronterizo, en caso que los manifestantes intentaran cruzar aduana mediante al país vecino para ingresar a la localidad de Fray Bentos o a la zona de exclusión de Botnia. El asambleísta Roberto Marchesini afirmó: “Es la sexta marcha que hacemos al puente y nunca hemos tenido una postura violenta. El gobierno de Uruguay está tratando de ensuciar la marcha. Están tratando de amedrentar, de meter miedo a la gente para que no participe”. La misma lectura hizo Fritzler al asegurar que “es ridícula” la presunción de que alguien quiera cruzar y acusó al gobierno oriental de “enardecer” los ánimos. “Ellos saben lo que hicieron mal”, sostuvo el asambleísta en referencia al gobierno encabezado por José Mujica. Los asambleístas aseguraron a Página/12 que también rechazarán su presencia el próximo miércoles, cuando se reúna por primera vez tras el fallo con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

La jornada de protesta comenzará a las 10, cuando por el lapso de dos horas, varios colectivos trasladen a los vecinos desde el Corsódromo de Gualeguaychú hasta la base misma del puente que comunica con la localidad uruguaya de Fray Bentos. A las 13, todos los manifestantes estarán en la base del puente para realizar como es costumbre en las marchas anuales una oración ecuménica, y cantar los himnos argentino y uruguayo, antes de dar comienzo a la caminata que los depositará de cara a la pastera finlandesa. El oficio religioso estará a cargo del obispo local, Jorge Lozano, del rabino Sergio Bergman y del Sheik Ibrahim Gabrl, además de contar con la presencia de otros representantes de los distintos credos. Los miembros de la Asamblea esperan entre la concurrencia a varias delegaciones que apoyan históricamente la protesta, como las de Concepción del Uruguay, Concordia, Colón y Paraná para iniciar a las 14 la caminata sobre la traza del puente. En paralelo, unas treinta embarcaciones zarparán del puerto en una caravana acuática, portando banderas argentinas y carteles de protesta. La novedad, en esta ocasión, será una balsa improvisada con botellas vacías de agua mineral que sostendrá una pancarta flotante, aunque según afirman desde la organización, aún no fue testeada en el agua.

Esta movilización llega en un momento en el que la ciudadanía de Gualeguaychú ve cercano el debate en torno a la continuidad o no del corte de la ruta 136. A pesar que algunos miembros de la Asamblea Ciudadana se muestran confiados en que el corte debe seguir, otros integrantes, comerciantes y vecinos sostienen que este método de protesta perdió peso luego del veredicto de la Haya, y las heridas económicas luego de años de bloqueo comienzan a sentirse. Fritzler por su parte, negó a este diario que el 2 de mayo próximo se convoque a una asamblea extraordinaria para debatir sobre el corte de Arroyo Verde y aseguro que “aún no hay fecha confirmada” para iniciar esta discusión.

Informe: Gabriel Morini