EL PAíS
› DUHALDE REUNE EL PERONISMO BONAERENSE PARA HABLAR DE POLITICA
Hoy hay asado y se esperan guiños
La excusa es el brindis de fin de año, la razón es ver a quién apoya Duhalde en la interna y la próxima elección.
› Por Fernando Cibeira
Qué mejor ocasión que un asado, buen vino y un brindis para hablar de política. El presidente Eduardo Duhalde piensa así y en ese marco de camaradería hoy hablará en la quinta “Los Caudillos” con los 200 dirigentes que manejan el peronismo bonaerense, decisivos para cualquier interna. Duhalde, todos creen, les mencionará las buenas posibilidades que ahora le otorga a su nuevo amigo, el gobernador de Santa Cruz, Néstor Kirchner, pero en el entorno presidencial no imaginan que pida ya un apoyo en firme. Y menos aún lo desean quienes empujan para que sea el propio Duhalde el candidato del PJ, una idea que –sostienen algunos– al Presidente cada día lo tienta más.
El jueves, Duhalde le prometió a Kirchner que el peronismo bonaerense lo apoyaría en la interna contra Carlos Menem. Pero en el entorno del santacruceño no creen en Papá Noel y resultó evidente su intención de no colocar todos los huevos en la misma canasta. Ayer se encargaron de enfriar las expectativas. “No existe una alianza con Duhalde”, sostuvo el jefe de campaña de Kirchner, Alberto Fernández, quien un par de días atrás parecía interesado en sellar un acuerdo. Pero Kirchner quiere mantener un equilibrio difícil: tener el apoyo del duhaldismo y no ser el candidato oficial al mismo tiempo.
A la quinta que Hugo Toledo tiene en Ezeiza concurrirá hoy la crema de la provincia: desde el gobernador Felipe Solá hasta el último presidente de distrito, desde ministros nacionales hasta intendentes de pequeños municipios. Como sucede con los amigos que hace mucho que no se ven, la excusa es el brindis de fin de año, pero será inevitable alguna bajada de línea. Quienes lo conocen, imaginan que Duhalde dará un guiño como el que hace unos meses jugó con el cordobés José Manuel de la Sota.
Luego de aquella señal, el ministro Aníbal Fernández, el presidente de la Cámara de Diputado provincial, Osvaldo Mércuri, y el ex intendente de Avellaneda, Baldomero “Cacho” Alvarez le armaron algunos actos más que aceptables a De la Sota, pero no hubo caso: no consiguieron que levantara en las encuestas y lo abandonaron a su suerte. Hoy, por ejemplo, Cacho Alvarez se convirtió en el principal impulsor de la iniciativa “Duhalde 2003”, idea que viene proclamando con pegatina de afiches en Capital y provincia. Otro de esa línea, el diputado José María Díaz Bancalari, admitió ayer que para él el mejor candidato es Duhalde pero que cada vez que le insinúa esa posibilidad “me mira como si estuviera loco”.
Locura o cierto, la opinión mayoritaria es que lo único que puede obstaculizar que el PJ bonaerense se vuelque a favor de Kirchner sería que Duhalde se decidiera al mano a mano contra Menem. En ese sentido, los movimientos del Presidente son difusos. Se sabe que mandó a medir con el encuestador Julio Aurelio la popularidad de las distintas alternativas de compañero de fórmula para Kirchner: su esposa Chiche, el ministro Juanjo Alvarez, los intendentes Julio Alak y Alberto Balestrini y hasta se menciona al ministro Roberto Lavagna. Cerca del santacruceño aclaran que tienen la potestad del nombre del candidato a vice pero admiten la posibilidad de sentarse a conversar.
Desde el otro lado, hay quienes prefieren destacar otro de los gestos de Duhalde de los últimos días que, en apariencia, no tiene nada que ver con la interna. Esto es nombrar al cordobés Juan Carlos Maqueda para miembro de la Corte Suprema, cuestión de sacarlo de la sucesión presidencial. Para ellos la jugada está clara: Duhalde renuncia el 25 de mayo como prometió, lo reemplaza su amigo, el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño, y Duhalde se vuelve a presentar en octubre. Dentro del peronismo bonaerense son mayoría los que quisieran ver a su conductor natural dando esa pelea antes que sostener a un candidato que no les garantiza el triunfo. “Si vos nos preguntás, todos queremos que Duhalde sea candidato”, se sinceraba ayer un importante dirigente que hoy irá al asado. Como en el comando de campaña de Kirchner conocen esta situación, fue que ayer quisieron bajarle el tono al encuentro de hoy. Luego de la reunión con el Presidente y de la posterior evaluación que hicieron algunos de sus hombres –el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, puntualizó que el Gobierno no tendría candidatos– comprendieron que por ahí no es bueno tomar al pie de la letra todo lo que les dicen en la Rosada.
“Kirchner tiene demasiada historia de independencia como para que alguien piense en que pueda ser candidato de alguien”, sostuvo Fernández en la postura diferenciada que mantuvo ayer. Y recordó que el gobernador de Santa Cruz “es el hombre que siempre confrontó con Menem y con Cavallo, y el que no aceptó ser el jefe de Gabinete de Duhalde porque era incompatible con su proyecto presidencial”.