Néstor Kirchner presentará formalmente el martes al núcleo de la “corriente renovadora” que respaldará su candidatura presidencial. Así lo acordó ayer con Eduardo Duhalde, con quien mantuvo un nuevo encuentro en la quinta de Olivos para diseñar la estrategia de campaña. “Ya lo lanzamos, la semana que viene presentamos a quienes lo acompañan y la otra blanqueamos la fórmula”, explicó un funcionario de la Casa Rosada que abreva en la política del “paso a paso”.
Kirchner y Duhalde arrancaron la cumbre manifestando su satisfacción por la manera en que fue recibido el lanzamiento de la candidatura.
Varios gobernadores ya están dispuestos a expresar públicamente su respaldo, pero tanto el mandatario santacruceño como el Presidente prefieren dar un “golpe de efecto” presentando a todos los integrantes del “frente” al mismo tiempo.
–El martes va a haber varias sorpresas, pero no queremos adelantar nada –crearon misterio ayer en Olivos cuando este diario requirió el listado de adhesiones.
Además de Kirchner y Duhalde, se los vio pasear por los jardines al secretario general de la Presidencia, José Pampuro, al secretario privado de Duhalde, Juan Carlos Mazzón, y al coordinador de la campaña del santacruceño, Alberto Fernández, entre otros.
El momento por ahora elegido para la presentación no es casual. Un día antes el gobernador Felipe Solá y una ristra de intendentes bonaerenses mantendrán una reunión clave con Duhalde. Allí analizarán la manera de “instalar” a Kirchner en el distrito, donde todavía encuentra resistencia de algunos reconocidos hombres del “aparato” local, un tópico que preocupa al santacruceño.
–No le des pelota, es hasta que la mastiquen –lo tranquilizó ayer Duhalde.
Se refería a un grupo de dirigentes que se tuvieron que resignar a desmontar el “Operativo Clamor” que reclamaba la candidatura del propio Duhalde. Entre ellos sobresale el presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Mércuri.
En el encuentro de ayer, Duhalde también le llevó a Kirchner la certeza de que Carlos Juárez se volcará a su favor. Se trata del hombre fuerte de Santiago del Estero cuya esposa “Nina” está a cargo hoy de la provincia. Lo mismo estaría por hacer el legislador Jorge Busti, cabeza del peronismo entrerriano, quien cambió su postura inflexible por otra más negociadora.
En el Gobierno calculan que para el martes ya van a lograr concentrar a un importante grupo de mandatarios y dirigentes distritales como para hacer una presentación formal. Solá lo admitió anoche, mientras participaba de un acto-homenaje a Arturo Jauretche.
“Será un encuentro para mostrar una instancia superadora a la interna Menem-Duhalde”, señaló.
Allí se anunciarán todas las adhesiones al intento de “renovación peronista”. Pero ayer se analizaba si lo más conveniente no era que las caras visibles sean las de dirigentes que reflejaran la idea de “cambio generacional”. Por eso se decía que no debían faltar el propio Solá,
Eduardo Fellner (Jujuy), Gildo Insfrán (Formosa) y Daniel Gallo (Tierra del Fuego), como referentes de los mandatarios. A ellos se sumarían el senador Jorge Capitanich, el titular de la Aduana, Mario Das Neves, y Daniel Scioli. El secretario de Turismo y Deporte, junto al intendente de La Matanza, Alberto Balestrini, son, además, dos hombres que Kirchner ve con buenos ojos para que lo acompañen en una fórmula.
“Vamos a instalar la idea de la renovación, del cambio, primero en el peronismo, y más adelante con los extrapartidarios. Y después vamos a producir hechos todos los días. De ahora en más no paramos”, señaló entusiasmado un funcionario que suele acompañar a Duhalde a sol y sombra. No dijo si la inminente campaña publicitaria que hará el Gobiernoratificando las elecciones generales para el 27 de abril integra el paquete de actividades.