EL PAíS › RECONSTRUYERON LA VIOLENTA SALIDERA EN LA PLATA
La fiscalía penal de La Plata reconstruyó ayer el momento en que Carolina Píparo fue “marcada” en el interior de una sucursal bancaria platense, para que los miembros de una banda de delincuentes le robaran el dinero que había extraído. Fue el 29 de julio último, y en el hecho la mujer, que estaba embarazada, resultó baleada y perdió a su hijo nonato. La diligencia judicial se cumplió por orden del fiscal Marcelo Romero, quien monitoreó la recreación junto a la fiscal de juicio Maribel Furnus, en la sucursal del Banco Santander Río ubicada en las calles 7 y 42 de La Plata. Romero explicó luego que “se logró recrear las imágenes tomadas por el banco, con actores policiales, para ilustrar el día de mañana al tribunal en el juicio oral, que esperemos sea pronto”. El fiscal aclaró que esta recreación “no aportó mucho” a la instrucción ya que se trabajó “con miras al juicio oral”.
En la diligencia judicial, que comenzó cerca de las 11.30, se recrearon los hechos captados en la filmación que hizo la entidad bancaria cuando Carolina obtuvo el dinero del cajero y se retiró del banco, movimientos que fueron controlados por el hombre acusado de actuar como “marcador”, Miguel Angel “Pimienta” Silva. Por tratarse de una recreación de la filmación, no estuvieron presentes ni Carolina Píparo ni su madre, que la acompañaba ese día, ni los imputados, aunque sí estuvieron los abogados.
En representación de la familia Píparo, presenciaron la recreación Fernando Burlando y Fabián Améndola, en tanto que por el imputado Carlos Burgos, sindicado como el autor del disparo, estuvo el abogado Rubén Carrazone. También estuvo el abogado Ramiro Pérez Duhalde, quien representa al cajero Gerardo Pereda, que entregó el dinero a Carolina Píparo y de quien ella sospecha que pudo haberla “entregado” a los delincuentes, advirtiéndoles sobre la cantidad de dinero extraído.
Un policía simuló ser Carlos Jordán Juárez, supuesto líder de la banda, quien ingresó a la sucursal del banco para salir poco después, tras lo cual ingresó otro policía que actuaba de Silva y vestía el buzo rojo que captaron las imágenes del banco. Dos minutos después, dos mujeres que actuaban de Carolina y su madre estacionaron un Volkswagen Polo en la playa del banco y tras descender ingresaron a la sede de la entidad.
Una vez dentro del banco se recreó la escena captada por la filmación, cuando Carolina es atendida por el cajero, mientras a pocos pasos de ella y su madre estaba Silva. A continuación se recreó el momento en que Silva se retiró del banco, cruzó la calle y aguardó la salida de Píparo y su madre, que fueron al estacionamiento, ascendieron al vehículo y se retiraron.
Según el fiscal Romero, esta recreación permitió constatar que “el lugar (la entidad bancaria) es chico, se puede ver, oír y seguramente se podía establecer visualmente que la señora Píparo estaba embarazada”, en referencia a lo declarado por Silva en su indagatoria, que dijo que no se había dado cuenta de que Píparo estaba embarazada. Tras esta primera recreación “paso a paso” se hicieron otras dos secuencias: una recreación dinámica, en tiempo real y otra recreación “desde los ojos de Carolina Píparo”, en la cual un filmador judicial acompañaba por detrás a quienes simulaban ser Píparo y su madre, para captar lo percibido por ellas desde su descenso del vehículo, el ingreso al banco y el retiro del dinero.
Romero informó que “se está evaluando” la reconstrucción del ataque a Píparo cuando llegó a la casa de su madre, en 21 y 36 de La Plata, y fue interceptada y baleada por los motochorros. “Allí tendremos que basarnos en los testimonios de víctimas y de los imputados”, aclaró el fiscal Romero. La diligencia judicial fue monitoreada por el comisario inspector Carlos Jaime, jefe de la Policía Científica de La Plata; el comisario inspector Daniel Cantarini, segundo jefe de la DDI La Plata, y el comisario inspector Daniel Piqué, jefe de la Policía Distrital de La Plata. La salidera bancaria ocurrió el 29 de julio cuando Carolina, embarazada de nueve meses, y su madre, María Ema, fueron a retirar dinero a la mencionada sucursal bancaria. Luego de ser baleada, la mujer tuvo que ser sometida a una cesárea de urgencia de la que nació su hijo Isidro, que murió una semana después.
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