Los docentes bonaerenses evaluarán la próxima semana si convocan a nuevas medidas de fuerza en reclamo de un aumento salarial que complete lo obtenido a principios de año. Sin respuestas por parte del gobierno provincial, los maestros agrupados en el Frente Gremial cumplieron un paro de 24 horas que contó con un alto nivel de adhesión en establecimientos públicos y privados. El ministro de Educación bonaerense, Mario Oporto, reconoció que la huelga –la tercera medida de fuerza en lo que va del año– fue “importante”, pero aclaró, que “no hay posibilidades de dar aumentos” en lo que resta del 2010.

“El paro fue contundente”, dijo a este diario el secretario general de Suteba (Ctera), Roberto Baradel, quien agregó: “Los datos que recogimos dieron como resultado un acatamiento del 97 por ciento, una clara demostración al gobierno de Daniel Scioli de que ésta es una necesidad sostenida por el conjunto de los trabajadores de la educación”. El Frente Gremial que integra –y que agrupa a los docentes de Suteba, FEB, AMET, UDA y Sadop– dispuso la medida el lunes pasado luego de que fracasara una reunión entre ministros y representantes de los sindicatos docentes. El plan de lucha incluyó una movilización a la Casa de la Provincia de Buenos Aires el miércoles pasado, que sus impulsores amenazaron con repetir la próxima semana, dependiendo de la respuesta de las autoridades. “Tiene que haber una respuesta salarial. Esperemos que hagan una propuesta concreta”, resumió Baradel.

La titular de la FEB, Mirta Petrocini, sostuvo que el gobierno provincial “no dio respuesta a este desequilibrio salarial que venimos padeciendo los docentes, ya que ratificaron su imposibilidad presupuestaria y limitación financiera para atender los reclamos”. “Era estrictamente necesario ayudar a los docentes con un aumento que pudiera paliar esta situación donde el índice de costo de vida va en fórmula uno y los salarios siguen en bicicleta”, ilustró.

Oporto, en tanto, dijo que las cifras arrojadas por el relevamiento del ministerio hablaban de una adhesión menor (en el orden del 70 por ciento) y mostraban que “sólo el 15 por ciento de las escuelas estuvieron cerradas” durante la jornada. “Hubo una mayoría de docentes que adhería y algunos que daban clases, mientras que las escuelas privadas tuvieron una actividad casi normal”, aclaró.

Finalizada la medida, un vocero de la cartera educativa reiteró la voluntad del gobierno de “retomar rápidamente las negociaciones” y detalló que la idea es volver a encontrarse con los sindicatos la próxima semana para discutir temas “que no tienen que ver sólo con lo salarial”. En ese sentido, Oporto sostuvo que si bien “es imposible otorgar un nuevo aumento en lo que resta del año”, todavía es posible “empezar a mirar el conjunto del 2011”, discutiendo “temas en los que habíamos llegado a un acercamiento”.

Trabado el debate salarial, es posible que estos temas contengan la llave de un posible acuerdo. “Hoy los dirigentes gremiales plantearon una serie de puntos amplios, una agenda que habla de cargos, infraestructura, salario familiar y son temas que podemos ir solucionando”, prometió Oporto. De esta manera, se podría comenzar a discutir al menos uno de los tres grandes pedidos del Frente Gremial –la eliminación del tope de las asignaciones familiares–, aunque el debate sobre el adelantamiento de las paritarias de 2011 para enero, tal como plantearon los sindicatos, promete ser más duro.