Mar 21.12.2010

EL PAíS  › DISPUTAS EN EL OFICIALISMO SANTAFESINO POR UN VETO DE BINNER

Un frente que tiene grietas

El gobernador habilitó el uso de la boleta única y desató una tormenta dentro del Frente Progresista. Sus aliados radicales no querían usar todavía ese sistema y acusan a Binner de pactar con Reutemann.

El Frente Progresista que gobierna Santa Fe sufrió un fuerte cimbronazo luego de que el gobernador Hermes Binner habilitara mediante un veto el uso de la boleta única en las elecciones internas de mayo del año próximo. La ley, apoyada por sus aliados de la UCR, estipulaba que el nuevo mecanismo comenzaría recién en la elección general, pero el mandatario vetó el artículo esta semana al asegurar que “el sistema electoral tiene que ser el mismo” en las generales y en las primarias. Los radicales denunciaron que la medida esconde un acuerdo del oficialismo con el sector del PJ que responde al senador Carlos Reutemann y, enojados, formaron su propio bloque en el Senado.

Los roces comenzaron esta semana cuando Binner firmó un decreto vetando el artículo 19 de la Ley de Sistema de Boleta Unica, una cláusula transitoria que limitaba su aplicación a las elecciones generales convocadas para el 24 de julio de 2011. “Luce inconveniente utilizar una modalidad para votar en las elecciones primarias y otra en los comicios generales”, fundamentó el mandatario, haciéndose eco de una iniciativa presentada por la línea del PJ afín a Reutemann. Su decreto pasó a la Legislatura provincial, donde los diputados tendrán dos semanas para aceptarlo o rechazarlo.

Las repercusiones llegaron a la Cámara alta, donde el viernes los cinco senadores provinciales de la UCR rompieron la bancada del Frente Progresista y formalizaron su propio bloque. La decisión fue uno de los coletazos de la medida y significó desplazar de la presidencia al socialista Juan Carlos Zabalza, que ahora se quedó en un bloque unipersonal. Distinto es por ahora el escenario en Diputados, donde socialistas y radicales reunirán hoy a sus 26 legisladores para acercar posiciones. No será fácil, ya que en los últimos días la UCR llamó a rechazar el veto de Binner y a mantener el texto original de la ley.

“Ratificamos lo que votamos. Las reformas deben aplicarse de manera gradual y hacerse antes del anuncio del cronograma electoral”, explicó a Página/12 el titular del radicalismo santafesino, Hugo Marcucci. Su partido le reclama al socialismo haber incumplido el acuerdo que hizo posible la sanción de la norma de boleta única: la condición de que no fuera usada en las internas abiertas.

En el mismo sentido se expresó el bloque del Frente para la Victoria que lidera Luis Rubeo. “Cambiar el sistema electoral a cinco meses de las elecciones nos parece poco transparente”, advirtió a este diario el kirchnerista Agustín Rossi. “Esto es un acuerdo entre los reutemistas y los socialistas que va a favorecer la confusión y la aparición de candidatos sin un historial político”, agregó.

Los dirigentes enojados con el veto entienden que el cambio favorece la visibilidad de las cabezas de lista en detrimento de los sellos partidarios, algo que beneficiaría a los dispersos caudillos peronistas de los departamentos chicos y que explicaría el apoyo de Reutemann.

Otro argumento de quienes se oponen es la dificultad de llevar a la práctica el nuevo instrumento de sufragio. “El proyecto es una versión aggiornada de la ley de lemas porque permite que un gobernador lleve incontables listas de candidatos”, opinó el diputado de Nuevo Encuentro, Marcelo Brignoni. Anticipando los problemas de implementación del sistema, un grupo de legisladores provinciales imprimió las listas de lo que sería la primaria con los postulantes a concejales de Rosario. “Mide 22 centímetros de ancho por 1,45 metro de largo”, detalló Brignoni.

Así y todo, la iniciativa avanza a paso firme en la Cámara baja provincial, donde cuenta con el apoyo de varios legisladores que habían votado la cláusula vetada. “Se trata de un proceso único que tiene dos partes, una primaria y una general. Es necesario que el sistema que rige ambas partes sea igual, algo que fue discutido cuando se derogó la ley de lemas”, sostuvo el titular del bloque socialista, Raúl Lamberto. Una mayoría simple alcanza para ratificar el cambio, algo probable si se tiene en cuenta que Binner cuenta para esta iniciativa con el apoyo del reutemismo y el obeidismo. Más aún: la diputada del GEN, Mónica Peralta, y el jefe del ARI y autor del proyecto original, Pablo Javkin, ahora también parecen dispuestos a aprobar el decreto, que igual restará reglamentar a principios de 2011.

El tema será tratado el miércoles en la Comisión de Asuntos Constitucionales, ya que el socialismo y el Peronismo Federal quieren aprobarlo en el recinto antes de la última sesión del año. “No veo la posibilidad de que votemos juntos”, confesó una fuente radical, quien no obstante dijo que hasta último momento mantendrán reuniones con el socialismo para intentar consensuar una postura. Caso contrario, se abrirá la primera grieta fuerte en el frente político que actualmente gobierna la provincia.

Informe: Federico Poore.

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