El gobierno de Santa Fe oficializó las fechas de las elecciones provinciales, en medio de una fuerte polémica entre los partidos locales. Luego de promulgar esta semana la ley de Boleta Unica, el gobernador Hermes Binner ratificó el mecanismo de primarias abiertas, simultáneas y obligatorias y estableció el 24 de julio como fecha de las elecciones generales, donde los santafesinos elegirán nuevas autoridades, a pesar de los reclamos del kirchnerismo y de los propios aliados radicales, quienes semanas atrás denunciaron el veto de Binner, que extendió el nuevo mecanismo a las primarias.

Las vacaciones de los políticos en la provincia serán más que breves ya que, según el nuevo esquema, el cierre de las listas de candidatos cae el 21 de febrero. “Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente”, graficó un dirigente provincial, que suspendió su descanso para zambullirse en la campaña. No es para menos: de acuerdo con la serie de decretos publicados ayer en el Boletín Oficial, las internas partidarias tendrán lugar el 22 de mayo y dos meses después la provincia celebrará elecciones generales.

Confirmado el cronograma, el bloque kirchnerista liderado por Luis Rubeo puso el grito en el cielo. “Hace diez años que el oficialismo de la provincia viene denunciando la manipulación del sistema electoral cerca de los comicios según el gobierno de turno, y hoy, cuando les toca ser gobierno, hacen lo mismo”, disparó a Página/12 el diputado provincial Oscar Urruty. Para el legislador del FpV, el nuevo sistema electoral “da por tierra con la idea de construcción política conjunta y beneficia a los individuos que tienen poder económico”. “Hay una connivencia entre la bancada oficialista y el peronismo ligado al senador (Carlos) Reutemann y al diputado (Jorge) Obeid”, aseguró.

En diciembre, el bloque radical mantuvo un enfrentamiento con los socialistas –sus socios en el Frente Progresista– por el veto de Binner al artículo 19 de la ley de Boleta Unica, una cláusula transitoria que establecía que el nuevo mecanismo se aplicaría sólo a partir de las elecciones generales. La pelea incluso derivó en una escisión de la bancada oficialista en el Senado provincial. El titular de la UCR santafesina, Hugo Marcucci, minimizó las diferencias. “La discusión por la boleta única es un capítulo terminado –explicó–. Ahora queda hacer una tarea de docencia muy fuerte para clarificar cómo será la votación.”

“La boleta única es simplemente una forma de votar, que supera un sistema muy antiguo como la boleta papel”, se defendió por su parte Raúl Lamberto, titular del bloque socialista en la Cámara baja, y agregó: “Ningún sistema electoral puede favorecer a un solo sector”. El jueves, el senador nacional Rubén Giustiniani expresó que el socialismo iba a tener que competir pronto “con otras fuerzas aliadas del Frente Progresista” y aseguró que Binner había dejado de ser el “candidato natural” en Santa Fe. En ese marco, Giustiniani sugirió que en el PS existían propuestas alternativas y que su espacio iba a tomar una decisión el 5 de febrero.

Informe: Federico Poore.