Para vacacionar, Jorge Macri optó por irse del país. Y lejos de su teléfono. La rosca del PRO lo abandonará por apenas una semana antes de que vuelva a hacer campaña por la costa como precandidato a gobernador macrista. “Nadie es la única opción”, le responde a Francisco de Narváez sobre su candidatura a gobernar la provincia. En diálogo con Página/12, no descarta que su primo Mauricio se presente en dos candidaturas este año: en la ciudad y luego en la presidencia.

–¿Va a ser el candidato a gobernador del PRO?

–Soy precandidato a gobernador. Y voy a trabajar para ser el mejor candidato de un frente que lo lleve a Mauricio a presidente.

–¿Está de acuerdo con que De Narváez es “la única opción”, como dijo él?

–Nadie es la única opción. Nadie es el único. Es un error plantearlo así.

–¿En qué situación están con De Narváez?

–Deseo que volvamos a competir juntos desde Unión-PRO. Espero que se pueda. Ni se ha roto la relación ni te obliga hoy el calendario electoral a sentarte a negociar.

–¿Con Graciela Camaño sí se están acercando?

–Sí, por ahora exclusivamente técnico, con el tema de seguridad. Yo la respeto, me parece que es una dirigente valiosa.

–¿Le aporta garra a la campaña?

–Es un cachetazo a la inseguridad. Sin duda tiene garra.

–Tenga cuidado con pelearse...

–No. Cuando nos sentamos a comer, le dije: “Estoy sentado a tu izquierda, que es donde estaba Kunkel”. Me dijo: “Pero vos no te lo merecés”.

–¿Está descartada una doble candidatura de Macri?

–Yo no descarto nada. Es imprescindible garantizar la victoria en la ciudad. Mauricio tendrá que decidir si tiene una doble candidatura o no.

–¿Gabriela Michetti no garantiza la victoria?

–El mejor candidato que tenemos es Mauricio. Después, hay dos muy buenos candidatos en igualdad de condiciones, que son Horacio (Rodríguez Larreta) y Gabriela.

–¿En igualdad de condiciones?

–Ninguno le saca mucha diferencia al otro.

–¿Van a un acuerdo con Eduardo Duhalde?

–No lo sé. Mauricio no se va a bajar. Es la contracara del kirchnerismo. Hay una polarización natural con él. Los grandes perdedores son los radicales, que quedan desdibujados.

–¿Una eventual candidatura de Ernesto Sanz los complica?

–No. Es excesivo que el radicalismo tenga tres candidatos. Es una danza de egos fuera de control.

–¿Le alcanza al PRO con lo que tienen de armado nacional?

–No nos alcanza sólo con lo que tenemos. Me imagino acuerdos provinciales, porque el Peronismo Federal, más que rutilantes figuras, tiene referentes en las provincias. Mi tía abuela hacía cubrecamas con patchwork. Cuando ves un pedacito de tela te parece que no tienen nada que ver, pero juntas hacen una pieza espectacular. El armado va a ser un patchwork entre lo nuevo del PRO y la experiencia de algunos sectores.

–¿Podrían ir a una interna con los peronistas?

–Me encantaría que hubiera una primaria como dice la ley. La ley es buena, pero el kirchnerismo no quiere que la reforma avance.

–¿Macri podría competir con Duhalde o Solá?

–No creo que haya tantos candidatos del Peronismo Federal. Hace falta un recambio en la política.

–¿Cómo ve el ofrecimiento a Miguel del Sel para ser candidato a gobernador de Santa Fe?

–Hay mucho prejuicio en la política. Escuché muchos kirchneristas espantados. Pero Scioli no es un hombre que venga de la política tampoco.

–Si llegaran a ganar la Presidencia, ¿qué medidas tomarían contra la “inmigración descontrolada” que denunció Macri?

–Ordenarla. Mientras la Argentina no puede darles oportunidades a los que vienen, no podemos seguir teniendo una inmigración desordenada. Un país defiende sus intereses y direcciona la inmigración. No quiere decir cerrar el país o ser xenófobos.

–¿Y qué harían con las ocupaciones?

–El espacio público hay que defenderlo haciendo cumplir la ley. Las usurpaciones son ilegales.

–¿Las desalojarían con la policía?

–Haríamos cumplir la ley a través de la Justicia.

–¿Y qué pasa si hay muertos, como ocurrió en el Indoamericano?

–Hay muertos todos los días en la Argentina porque no se cumple la ley.