EL PAíS
Servini salomónica, ahora dictó un fallo que mejora al menemismo
El jueves falló a gusto del duhaldismo. Ayer favoreció al menemismo. La semana que viene decidirá cuál de los dos ríe último.
El jueves María Romilda Servini de Cubría dictó una resolución ratificando que, legalmente, está todo en regla para que haya elecciones presidenciales el 27 de abril. Una noticia que alegró al duhaldismo. Ayer la misma jueza federal electoral resolvió ampliar las facultades del veedor judicial que controla a la Junta Electoral. Fallo que mejora, módicamente, la posición de los menemistas. Ahora “sólo” falta que la magistrada defina si es válida la decisión del Congreso del PJ que anuló las internas y adoptó el pintoresco sistema de neolemas. La resolución saldrá la semana que viene. Recién entonces se sabrá cuál de las dos facciones antagónicas del PJ ríe último.
En su breve resolución de ayer, Servini amplió las facultades del veedor judicial Ramón Ruiz. El citado abogado tendrá, de ayer en más, “la misión de producir todos los actos tendientes a zanjar las diferencias” dentro del partido “a fin de lograr el consenso necesario que les permita superar la crisis que atraviesa en la actualidad”. Servini adujo como fundamentos de su dictamen “las dificultades existentes en la agrupación para consensuar criterios de gobernabilidad partidaria”, plasmadas en el fracaso de la audiencia de conciliación entre menemistas y duhaldistas,
El Congreso y el Consejo Nacional partidario deberán, en lo sucesivo, avisar al veedor de todas sus reuniones, en las que Ruiz podrá opinar, pero no votar para luego informar al juzgado electoral.
La jueza considera que la ampliación de facultades permitirá “contar con mayor inmediatez en el conocimiento de las circunstancias que afectan la vida interna de la agrupación, a fin de sumar la mayor cantidad de elementos de juicio posibles al momento de resolver las controversias en trámite”.
La resolución, que limita la autonomía del Partido Justicialista conducido por el duhaldismo, fue conocida ayer a la tarde. A esa altura, el Gobierno había divulgado generosamente su satisfacción por lo que Su Señoría había sentenciado el jueves. Esto es, avalar la convocatoria a elecciones generales para el 27 de abril, complaciendo así un pedido formulado por el propio presidente Eduardo Duhalde el 31 de enero. El jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, en su clásica conferencia de prensa matutina en la Casa Rosada, fue el encargado de difundir los plácemes. Atanasof afirmó que la medida “termina con las especulaciones” sobre una posible postergación del comicio. “Ahora sí podemos decir sin ninguna duda que los argentinos votaremos el próximo 27 de abril”, sostuvo el jefe de Gabinete con una condigna sonrisa en su rostro.
Después de tanto trajín, a Servini le sigue quedando un tema esencial para resolver referido a la interna pejotista. Es, claramente, el más importante. Se trata de resolver si la impugnación presentada por el menemismo al Congreso partidario que suspendió las internas y consagró el sistema de neolemas. Se supone que la jueza emblemática del menemismo fallará la cuestión en la semana que viene. Pero sólo podrá hacerlo una vez cumplido un trámite extraño que ella misma encargó: les pidió a los fiscales un nuevo dictamen sobre “algunas cuestiones secundarias”. El dictamen debe estar presentado el martes y seguramente tras cartón la jueza laudará. Fuentes de Jefatura de Gabinete y del Ministerio de Justicia aseguraron a este diario contar con indicios de que, esta vez, fallará a su favor. El curriculum de la jueza no alienta tamaño optimismo.