La Escuela de Comercio Carlos Pellegrini continúa tomada por los alumnos, después de que fracasaran ayer las negociaciones entre las autoridades y los dirigentes estudiantiles. “Hasta que no haya una fecha para la mesa de diálogo con el Consejo Superior (de la UBA) para solucionar y debatir las problemáticas que está viviendo hoy el colegio, la toma no se va a levantar”, avisó Ana Minujín, presidenta del centro de estudiantes.

“Tuvimos la mejor predisposición para hallar una solución, pero otra asamblea de estudiantes decidió continuar con la toma del colegio”, admitió Jorge Fornasari, rector del colegio dependiente de la Universidad de Buenos Aires. El centro estudiantil y el gremio docente AGD –que ayer realizó un paro– rechazan la forma en que las nuevas autoridades de la escuela designaron a docentes interinos. Además, los alumnos critican los “fuertes planes de cambio en el colegio, que afectan directamente su carácter crítico, universal y humanístico”.

La toma comenzó en la noche del miércoles pasado y se levantó durante el fin de semana, para permitir las negociaciones de ayer a la mañana. Por más de tres horas se reunieron representantes de los alumnos con las autoridades del Pellegrini. La presidenta del centro contó que su pedido fue que se conforme “una mesa de diálogo con el Consejo Superior”. Consideró que “este año se profundizó la problemática del Pellegrini” y apuntó contra la gestión que asumió en febrero, encabezada por Fornasari: “Atentan contra los intereses del colegio y del proyecto académico que siempre defendimos”.

El rector aseguró que durante la reunión aceptó “llevar personalmente” la solicitud estudiantil al Consejo Superior, pero –dijo– “esa iniciativa no prosperó porque nunca me acercaron el petitorio. Mostré la mejor de las predisposiciones, pero el petitorio nunca llegó a mis manos”. Los alumnos también solicitaron que la escuela no compute ausencias a quienes participan de la protesta. “Había aceptado rever la decisión de poner ausente a los chicos que no están tomando clases –aseguró Fornasari–, si se levantaba de inmediato la toma del colegio, algo que ahora quedó sin efecto.”