EL PAíS
› WALSH PRESENTO SU FORMULA EN LA PLAZA DE MAYO
Izquierda Unida a la batalla
Con Parrilli, Echegaray y Ripoll en el palco, la candidata llamó a votar a IU en lo que llamó la “batalla electoral”.
Bajo banderas azules y rojas, y un denso humo de bengalas que se mezclaba entre los miles de militantes que llegaron a Plaza de Mayo, Izquierda Unida presentó ayer su fórmula para las próximas elecciones de abril. Ya entrada la noche y después de las palabras de Patricio Echegaray y Vilma Ripoll, la candidata a presidenta Patricia Walsh destacó el papel que deberá cumplir la izquierda en la nueva “batalla electoral”.
Luego de una semana que comenzó en conversaciones con el Partido Obrero para lograr un frente electoral, y terminó con fuertes críticas entre dirigentes de uno y otro lado, Izquierda Unida lanzó finalmente su dupla. Con Patricia Walsh a la cabeza y un independiente Marcelo Parrilli como vice, quedó conformada la unión que conforma IU, con el Partido Comunista y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST).
Durante su discurso de cierre, interrumpido decenas de veces por los bombos que sonaban desde el pie del escenario, Walsh enumeró las principales propuestas de su partido. La primera se basa en el no pago de la deuda externa y el rompimiento de relaciones con el Fondo Monetario Internacional. “No debemos pagar la deuda porque es ilegal e inmoral. Son ellos los que nos deben a nosotros y tendrán que pagar”, gritó desde el palco instalado delante de la Pirámide de Mayo. Otro de los puntos que prometió cumplir si llega a la Presidencia es la estatización de todos los servicios públicos privatizados durante la década menemista.
Respaldada sobre el escenario por piqueteros, asambleístas y trabajadores de fábricas recuperadas, la candidata a presidenta aprovechó la oportunidad para destacar que aunque la unión entre su partido y el Obrero de Altamira no se logró, ésa seguirá siendo su principal pelea. “Me causa un dolor personal no haberlo logrado. Esta vez la unidad quedó pendiente pero no nos vamos a resignar”, dijo bajando el tono a la disputa de la semana. Mientras tanto, cientos de jóvenes pedían con su canto que “no se escucha, griten todos, unidad de los que luchan”.
De la unión entre los partidos más importantes de la izquierda también habló la candidata a jefa de Gobierno de la Ciudad, Vilma Ripoll, aunque sus palabras fueron más duras que las de su compañera. “Hay sectores de izquierda como el PO que se siguen negando a la unidad. Parece que no han aprendido nada y siguen repitiendo los mismos errores”, aseguró. Con un discurso fuerte, en el que resaltó el coraje, la confianza y las propuestas como las principales armas de Izquierda Unida, la actual legisladora porteña hizo referencia a la situación que transitará el país luego de las elecciones de abril. Destacando que si “intensificamos la lucha, llegaremos a una segunda vuelta”, Ripoll adelantó un “nuevo argentinazo” contra un próximo débil gobierno que caerá “por la lucha del pueblo, como el de Fernando de la Rúa”.
Detrás de una bandera que aseguraba que “el único cambio es la izquierda” y vestida de rojo, a tono con el color que tiñó la tarde, Walsh cerró el acto augurando un gobierno de los trabajadores, por “nuevos, urgentes y luminosos octubres”.