Mientras Eduardo Duhalde analiza junto a su esposa Chiche el resultado electoral de la primarias en una estancia misionera y se lamenta de la ruptura con Alberto Rodríguez Saá, el gobernador puntano reafirma la idea de ir solo y sin otras alianzas que las que ya había cerrado antes de la contienda presidencial, al tiempo que alimenta la esperanza de desplazar al bonaerense del liderazgo del peronismo anti K.

Duhalde ya está instalado en Apóstoles, en la estancia del empresario yerbatero y diputado nacional Ramón Puerta, a quien tampoco le fue bien en las PASO: se ubicó cuarto en la disputa por una banca en el Senado en la lista de la alianza del duhaldismo con el PRO. El ex presidente interino redefine allí su estrategia de campaña para la elección presidencial de octubre. Antes de partir dejó dos definiciones sobre su performance en las primarias: que fue “muy pobre” y que “fue un error haberme separado de Rodríguez Saá”.

La boleta de Compromiso Federal (de los hermanos Rodríguez Saá) cosechó ocho preciados puntos a nivel nacional y siete en territorio bonaerense. De haber sumado esos votos para sí, Duhalde hubiera quedado como el principal contrincante de la Presidenta en octubre.

La promocionada interna federal con “El Alberto” –al estilo de las primarias estadounidenses– se frustró en el tercer “superdomingo” que abarcaba a varias provincias del centro del país en medio de mutuas denuncias de fraude. Duhalde dio por terminada la experiencia y el puntano no se lo perdonó. Por eso le apuntó directamente por la impugnación de la candidatura a gobernador bonaerense de su hermano, “El Adolfo”, quien también va por renovar su banca de senador por San Luis.

A diferencia de Duhalde, El Alberto está más entusiasmado con su cosecha propia de votos. No solo fue el único que le ganó a CFK en su territorio, sino que amplió su influencia a las vecinas provincias cuyanas, Mendoza y San Juan, donde salió segundo. Ayer se reunió con sus candidatos en esas provincias para intentar sumar más votos en octubre.

Lo mismo hará el martes de la semana que viene en la Capital Federal con el resto de los candidatos de todo el país. Ahí reafirmará su postura de ir solo, redoblar la campaña con micros que saldrán desde San Luis a recorrer “todos los distritos del país” y garantizar la fiscalización del comicio, con muchos de sus militantes puntanos distribuidos en las principales provincias. Rodríguez Saá quiere ser el candidato del PJ disidente mejor ubicado para desplazar a Duhalde de ese liderazgo.