La Cámara Federal confirmó el procesamiento con prisión preventiva del ex piloto naval Julio Alberto Poch por su actuación en los denominados vuelos de la muerte durante la última dictadura. Los jueces Eduardo Farah y Martín Irurzun consideraron que el relato de Poch ante sus ex compañeros de la aerolínea holandesa Transavia no es una confesión, pero sí “un importante indicio”, que sumado a su formación y a su “efectiva capacidad” para pilotear aviones de carga como los que se usaron para arrojar personas al vacío permite probar su responsabilidad en segunda instancia. La Cámara redujo el embargo de bienes de 41 a 29 millones de pesos, le encomendó al juez Sergio Torres elevar el caso a juicio y ordenó que Poch espere el proceso en prisión, entre otras razones por “el riesgo de presión sobre los testigos” que ya sufrieron dos de sus ex compañeros en Holanda.