Entrar y salir ayer de la Capital Federal no fue tarea sencilla: miles de desocupados cortaron los accesos a la ciudad desde el sur y el oeste del conurbano bonaerense en reclamo de puestos de trabajo y alimentos. Entre las reivindicaciones figuraron también el pedido de liberación de los detenidos durante protestas sociales y el cese de la represión policial contra ese tipo de manifestaciones. Los piquetes fueron instalados por la mañana y se levantaron recién a última hora de la tarde, lo cual provocó serios inconvenientes de tránsito.
Los cortes fueron levantados aunque eso no quiere decir que la protesta no vaya a repetirse en los próximos días. Los piqueteros serán recibidos hoy a las 12 por el ministro de Trabajo bonaerense, Mariano West, no depositan mayores expectativas en esa reunión y ya analizan la posibilidad de continuar con las manifestaciones. “Si seguimos sin respuesta, probablemente habrá otro plan de lucha, ya que es el quinto encuentro con un funcionario y hasta ahora no hubo ninguna solución concreta”, advirtieron.
Los piquetes que ayer complicaron la circulación desde y hacia la Capital Federal fueron realizados por distintas agrupaciones y reunieron a unas 3 mil personas. Entre otras organizaciones, participaron de los cortes la Corriente Clasista y Combativa, el Movimiento Independiente de Jubilados y Pensionados, la Coordinadora de Desocupados Aníbal Verón, el Polo Obrero y “Barrios de Pie”.
Las protestas tuvieron lugar básicamente en los accesos que vinculan la ciudad con las zonas del sur y el oeste del conurbano. Estuvieron cerrados los puentes Pueyrredón (tanto el nuevo, como el viejo), La Noria, Avellaneda y Alsina; la autopista Buenos Aires-La Plata; un sector del Acceso Oeste en Morón, la ruta 36 en Florencio Varela y la entrada a Capital por avenida Alberdi, en el barrio de Mataderos. También hubo cortes en distintos lugares del Gran Buenos Aires.
Sobre todo en la zona sur, donde los piquetes impidieron totalmente la entrada y salida de vehículos de la Capital Federal, se formaron desde la mañana largas colas de ómnibus de media y larga distancia, automóviles y camiones. La espera concluyó con la apertura de los pasos, recién entrada la tarde.
Los únicos lugares donde la protesta continuaba anoche eran en Dock Sud, en la entrada de la refinería de Repsol-YPF; en Florencio Varela, sobre la ruta 36 a la altura del barrio Pepsi; y en La Plata, en la avenida 44 a la altura de Los Hornos. En los últimos dos casos, los cortes ya llevan ocho días en reclamo de puestos de trabajo y entrega de alimentos.
Esa es la principal demanda de los desocupados, aunque el menú de reivindicaciones es más amplio y va variando según los piquetes. Los piqueteros también reclaman, entre otras cosas, por la libertad de los detenidos durante las protestas sociales, por el reconocimiento de las organizaciones que los agrupan para el reparto de los planes asistenciales, el no pago de la deuda externa y la devolución de los depósitos bancarios. Además, hubo pedidos de atención sanitaria y educativa y el juicio y castigo a los responsables de las muertes del 20 de diciembre durante la represión que antecedió la renuncia de Fernando de la Rúa a la Presidencia, así como la estatización de la banca y las empresas estratégicas.
Durante la jornada de ayer también hubo manifestaciones de piqueteros en distintos puntos del interior del país. Con reclamos similares a los que se enarbolaron sus pares en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, distintos grupos de desocupados hicieron cortes en Mendoza, Mar del Plata, Santiago del Estero y San Luis.