“Comparte la importancia del tema y comprometió una resolución lo más rápido posible.” Así de escueto fue el comentario que el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, entregó a la prensa sobre su reunión con el titular de la Corte Suprema de Justicia, el riojano Julio Nazareno. La audiencia había sido pedida por Ibarra luego de que la jueza con competencia electoral, María Romilda Servini de Cubría, suspendiera los comicios porteños. Allegados a Ibarra se debatían entre el optimismo y el escepticismo. Los más pesimistas esperaban para el martes una acordaba desfavorable. Lo decían por una versión que afirmaba que los integrantes del alto tribunal habrían recomendado la separación de las elecciones de diputados nacionales de las de jefe de Gobierno. Por cierto el único en condiciones de lograr eso es nada menos que Eduardo Duhalde, que fijó por decreto la fecha del 8 de junio luego de que Ibarra anunciara que ese día se elegiría el nuevo jefe de Gobierno.
A pesar de que el procurador general, el mendocino Nicolás Becerra, se encuentra fuera del país, ayer el fiscal Luis Santiago Warcalde opinó “que corresponde la competencia de la Justicia Federal” en los comicios porteños. Luego de hacer un repaso de los argumentos jurídicos realizados tanto por Servini de Cubría como por Ibarra, el fiscal marcó claras diferencias con lo actuado en el caso de Luis Barrionuevo y las elecciones de Catamarca. “En efecto, a diferencia de lo que sucede ahora, en esa oportunidad no se había trabado un conflicto positivo de competencia, pues se trataba de dos causas independientes, en una de las cuales se había dictado una medida cautelar, suspendiendo la decisión que había adoptado el juez provincial en la otra, y todo ello dentro del marco de una elección solamente para cargos locales”, argumentó Warcalde.
Aunque los dictámenes de la procuración no son vinculantes para la Corte Suprema, el hecho de que el fiscal haya trazado una línea diferenciadora entre los comicios de Catamarca y los porteños presenta en bandeja un nuevo argumento para los miembros del alto tribunal. No por nada a la salida de su entrevista con Nazareno, el jefe de Gobierno de la Ciudad sostuvo que “en las elecciones locales debe intervenir la Justicia local. Nunca un juez federal puede meterse en una elección local y, sin embargo, esto fue lo que hizo Servini de Cubría”. Por si fuera poco con Servini también podrían llegar a tomar parte los integrantes de la “Corte de los milagros”.
En el repaso de los planteos judiciales, el fiscal Warcalde hace referencia a la simultaneidad entre las elecciones a jefe de Gobierno y las de diputados nacionales. En diálogo con los periodistas Ibarra, señaló que “la simultaneidad es un concepto jurídico y no una coincidencia de fechas”. Esto lo llevó a sostener que “Servini debe regular la elección de diputados nacionales” y que “las otras elecciones son responsabilidad del Tribunal de Justicia, que es la justicia local”.
“La Corte Suprema tiene que demostrar que es independiente a cualquier presión política, y, con su fallo, reafirmar que la Ciudad de Buenos Aires es autónoma y que está en condiciones de organizar, a través de su tribunal superior, su propio acto eleccionario”, declaró Mauricio Macri, quien también tiene sus fichas en la fecha del 8 de junio. En clara referencia a los peronistas porteños, Macri también habló de “vieja dirigencia que apuesta a la judicialización de la política”. Mientras se suceden frenéticas reuniones para acordar listas, los seguidores del kirchnerista, Rafael Bielsa anunciaron que el próximo sábado presentarán en sociedad la fórmula del sector, que contará con Patricia Vaca Narvaja, como precandidata a vicejefa. En ese caso, el hecho marcaría el fin de las negociaciones para que Bielsa acompañe a Ibarra. Lejos de esto, en el entorno del actual jefe de Gobierno señalan que “las negociaciones continúan”.