Máximo Kirchner cumplió ayer su segundo día de internación tras haber sido operado el lunes en su rodilla derecha por una artritis séptica y deberá permanecer en el hospital Austral de Pilar por lo menos por dos días más. El hijo de la jefa de Estado se recupera de la infección que le impedía caminar, acompañado por su novia Rocío García. Según el último parte médico, se encuentra estable y de buen ánimo luego de que “se le efectuó un lavado articular atroscópico en quirófano, para resolver la infección, con resultado exitoso”. Fuera del establecimiento, militantes kirchneristas de las agrupaciones La Cámpora, Kolina y del Movimiento Evita colgaron banderas y acamparon para acompañar la recuperación de Máximo Kirchner. La Presidenta acompañó el lunes a su hijo durante varias horas mientras era intervenido, por lo cual suspendió una serie de actos que tenía previstos en su agenda. Luego, ante la pronta mejoría y evolución favorable de Máximo, CFK retomó su actividad.