La Justicia chilena recibió una demanda para investigar al sacerdote argentino Christian von Wernich por su responsabilidad en la desaparición de una ciudadana chilena en Buenos Aires en 1978. Von Wernich fue denunciado penalmente por el fiscal de La Plata Félix Crous por torturas, homicidios y desapariciones, pero su paradero era desconocido hasta que fue descubierto por medios argentinos y chilenos en el balneario El Quisco, cerca de Santiago. La presentación hecha ayer en Chile busca esclarecer las circunstancias en que desapareció Cristina Carreño, militante del Partido Comunista, cuyo rastro se perdió luego de ser detenida por la policía de Buenos Aires. La acción judicial es una ampliación de una querella por los crímenes de la “Operación Cóndor”, que unió a los servicios de inteligencia de las dictaduras del Cono Sur en la década de los setenta. Von Wernich era capellán de la policía y fue colaborador directo del jefe de la Bonaerense durante la última dictadura, Ramón Camps. Participó, personalmente, de sesiones de torturas y hostigamiento de detenidos.