EL PAíS
La intención de voto de Menem, en vez de crecer, baja
Las encuestas predicen un triunfo abrumador del santacruceño en la segunda vuelta, y algunas señalan que Menem estaría perdiendo algunos de los votos que obtuvo en la primera ronda.
› Por Raúl Kollmann
Carlos Menem no sólo no logra recortar la ventaja que le lleva Néstor Kirchner de cara al ballottage, sino que hay evidencias de que pierde incluso votantes que lo apoyaron en la primera vuelta. El santacruceño aventaja al riojano por 45 puntos y la diferencia –que ya se registraba la semana pasada– no se estrecha con el correr de los días y la intensa campaña que despliega Menem en televisión. En la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, por ejemplo, Menem perdió diez puntos en los diez días que han transcurrido desde la primera vuelta.
Las conclusiones surgen de una encuesta realizada por la consultora Equis, que lidera Artemio López. En total se entrevistaron 3110 personas en los 13 distritos electorales más importantes del país y que agrupan al 86,3 por ciento del padrón. En el trabajo se respetaron las proporciones por edad, sexo y nivel económico-social.
Si se toma en cuenta el voto proyectado, es decir como se hace en la realidad, sin votos en blanco, nulos ni impugnados y asignando el 8 por ciento que aún está indeciso, la ventaja de Kirchner es abrumadora. Se impone 72,9 a 27,1. Este dato es similar al establecido la semana pasada por un estudio similar de Equis y también otro realizado por la consultora OPSM, que conduce Enrique Zuleta Puceiro. Hasta ahora, la totalidad de los encuestadores coinciden en que la diferencia a favor de Kirchner es enorme y que debe producirse un milagro para que no se convierta en el próximo presidente.
Como es lógico, el trabajo de Equis demuestra que el santacruceño se impone aun en las provincias donde perdió. Por ejemplo, en Córdoba, donde salió quinto con el 11 por ciento de los votos, ahora sacaría el 54 por ciento y Menem, que se ubicó primero el 27 de abril, con el 28 por ciento de los votos, ahora treparía apenas al 30 por ciento. Algo similar ocurriría en Santa Fe. Kirchner salió cuarto en la primera vuelta y cosechó el 16 por ciento, ahora sacaría el 53 y Menem que ganó con el 25 por ciento, ahora repetiría ese porcentaje.
Según el estudio de Equis, Kirchner ganaría en los 13 distritos estudiados, lo que incluye a Mendoza, Entre Ríos, Tucumán, Chaco, Neuquén, Chubut, Formosa, Misiones y Jujuy y, por supuesto, en Capital Federal y Gran Buenos Aires. En el distrito porteño, había ganado Ricardo López Murphy, pero ahora, de acuerdo con la intención de voto registrada por Artemio López, el santacruceño sacaría el 64 por ciento de los votos y Menem apenas el 13 por ciento.
Para Artemio López existe un alto nivel de decisión, tanto en los votantes de Menem como en los de Kirchner, lo que significa que es muy difícil que esas personas cambien su voto. Esto explica también la belicosidad de la campaña del riojano, con acusaciones que no realizó en la primera vuelta –que la Argentina de Kirchner será como Biafra, que volverá la violencia o que el santacruceño es montonero– y que tienen el objetivo de conmover a un electorado que no parece dispuesto a conmoverse para cambiar su voto.
Por último, el estudio de Equis indica que el voto en blanco, nulo o impugnado puede rondar el diez por ciento, un porcentaje que supera en mucho al de la primera vuelta ya que hay una franja de ciudadanos que no quiere optar entre los dos candidatos originados en el peronismo y que quedaron para el ballottage.