La empresa Transportadora de Gas del Norte (TGN) juega una de sus últimas cartas antes de la quiebra. Luego de desistir del Acuerdo Extrajudicial Preventivo (APE) por la falta de acuerdo con el Estado y el rechazo que la Justicia dio al pedido de concurso preventivo, la empresa mantiene en el canje de deuda propuesto a los acreedores las expectativas para aliviar la situación en el corto plazo. Esa operación no se ve afectada por el fallo en contra que hizo caer la solicitud de concurso, aseguran desde la firma. Frente al usual reclamo del sector para actualizar las tarifas, fuentes sindicales advirtieron que también debe evaluarse la estructura de costos.

Los jueces Julia Villanueva, Eduardo Machín y Juan Garibotto, de la Sala C de la Cámara Comercial, rechazaron días atrás el recurso de apelación interpuesto por TGN, controlada por Techint, frente a la negativa inicial de la jueza Valeria Pérez Casado de dar lugar al concurso. La jueza de primera instancia rechazó el pedido de apertura de concurso para “evitar una sucesión de peticiones de concursamiento que paralicen los pedidos de quiebra”, amparándose en el artículo 31 de la Ley de Concursos y Quiebras.

La firma inició en 2009 un Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE) con el objetivo de reestructurar su deuda, que requería la conformidad tanto de los acreedores privados como del Estado. Esa reestructuración deviene del default que decretó la empresa en diciembre de 2008, al no poder hacer frente a una deuda que, a su vez, ya había sido refinanciada en 2006. “El APE tuvo la aceptación que se requería, pero estuvo frenado dos años porque la propuesta de aumento tarifario no se homologó por el Estado. Las premisas que habíamos diseñado cambiaron, por eso se decidió desistir del APE y concursar”, explicaron a este diario desde TGN.

La falta de acuerdo con el Gobierno, que mantiene tarifas prácticamente congeladas desde 1999, guarda relación con la negativa de la empresa de anular los juicios que accionistas mantienen contra el Estado en el Ciadi, que depende del Banco Mundial. Uno de esos casos fue parte del argumento que presentó el gobierno de Estados Unidos para suspender a la Argentina de su sistema de preferencias arancelarias. Es el juicio que ganó CMS Gas Transmission Company en 2005, firma que luego vendió su participación en TGN al fondo de inversión Blue Ridge, que ahora tiene los derechos para reclamar frente al Ciadi. Otras empresas del sector como Metrogas y Gas NEA están en situación de concurso preventivo de acreedores.

“El APE es un proceso de naturaleza concursal. (...) rechazada, desistida o no ratificada una petición de concurso preventivo, las que se presenten dentro del año posterior no deben ser admitidas si existen pedidos de quiebra pendientes”, explicaron los camaristas. A la vez, subrayaron que existen varios pedidos de quiebra pendientes, algunos de los cuales la firma canceló con pagos puntuales. De ahí la crítica de la Justicia de que “el deudor pretende demostrar que no está en cesación de pagos y que sí lo está”, al pagar ante pedidos de quiebra y a la vez buscar concursarse. Fuentes de TGN indicaron que se analiza la posibilidad de hacer nuevas presentaciones a la Justicia.

Además, en la firma aseguran que la negativa a aprobar el proceso de concurso no pone trabas en lo formal al canje de la deuda lanzado la semana pasada, en simultáneo con el proceso judicial. “Como el APE y la convocatoria de acreedores no salieron, la tercera vía fue llegar a un acuerdo entre privados a través de un canje voluntario”, analizaron fuentes sindicales. La operación debe llegar al 88 por ciento de aceptación. La Anses, que tiene el 7 por ciento del capital, daría el visto bueno.

La deuda total que entra en el canje es de 345 millones de dólares y la quita propuesta está entre el 20 y el 30 por ciento. Además, TGN ofrecerá unos 100 millones de dólares en efectivo para los acreedores que acepten el recorte. El plazo para aceptar la propuesta vence el 8 de agosto.