EL PAíS
› CON DOS COMPETIDORES MENOS, IBARRA AFIRMA SU RELACION CON CARRIO
“Reconocimiento al trabajo en la ciudad”
› Por Santiago Rodríguez
Si alguna duda había de que Aníbal Ibarra no cede porque sí a su compañero de fórmula Daniel Filmus para que se haga cargo del Ministerio de Educación, quedó despejada ayer en el momento en que Néstor Kirchner anunció quiénes integrarán su gabinete: entre los colaboradores que el santacruceño eligió para que lo acompañen en la primera línea de su gestión, figuran los dos hombres a los que apoyaba como candidatos a jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires. Se trata de Rafael Bielsa, designado para ocupar la Cancillería, y Gustavo Beliz, quien estará al frente de la cartera de Seguridad y Justicia, cuyos pases al escenario nacional allanan el camino del actual mandatario porteño en busca de su reelección. Mientras avanza en un acuerdo a nivel local con el presidente electo, Ibarra también consolida su coalición con Elisa Carrió, quien hoy lo acompañará por primera vez en dos actos públicos.
“No nos convertimos en oficialistas. No hay ningún acuerdo y esto lo quiero dejar en claro: fue un planteo para que quien está hoy al frente de la Secretaría de Educación en Buenos Aires pueda ir al Ministerio de Educación”, aclaró ayer Ibarra y destacó que “es una gran satisfacción porque reconoce el trabajo que se hizo en la ciudad”.
El hecho de aparecer demasiado involucrado con Kirchner es algo que preocupa a Ibarra desde que se planteó la posibilidad de que Filmus fuera a Educación. El ex fiscal ha manifestado más de una vez sus reparos acerca de que no todo lo que acompaña al santacruceño expresa la renovación de la política, pero además acercarse más de la cuenta a Kirchner podría desestabilizar la coalición que logró establecer con Carrió, quien tiene una posición más intransigente frente al nuevo gobierno.
Aún así Ibarra decidió ceder a su compañero de fórmula por dos razones: una, porque a partir de su propia experiencia de gestión entiende que no es razonable cerrarle el crédito cuando ni siquiera se acomodó en la Presidencia y en ese contexto deben leerse las declaraciones que también hizo ayer acerca de que acompañará al nuevo gobierno porque “después de lo que nos pasó sería una gran irresponsabilidad sentirnos indiferentes o apostar al fracaso”. El otro motivo fueron las señales que le dieron los kirchneristas sobre sus deseos de llegar a un acuerdo de cara a las elecciones porteñas previstas para el próximo 24 de agosto.
Que Beliz y Bielsa ya no estén en carrera por la Jefatura de Gobierno es un primer paso en ese sentido. De esos dos candidatos al que los ibarristas siempre tuvieron en su mira era al ahora designado canciller porque lo incluían dentro del espacio progresista y consideraban que disputaba el mismo electorado. De hecho, Ibarra estuvo a un paso de sumar a Bielsa a la coalición que respalda su reelección. Con Beliz, en cambio, no hubo tratativas y el ex fiscal aclaró anteayer que ahora tampoco se plantea la posibilidad de llegar a un acuerdo con el sector que encabeza.
El modo concreto en que se traducirá el apoyo de Kirchner a Ibarra es algo que los operadores de uno y otro dejaron para hablar en los próximos días. Los ibarristas pretenden básicamente sumar a los dirigentes que impulsaban la candidatura de Bielsa, entre los que sobresalen su compañera de fórmula Patricia Vaca Narvaja y los legisladores porteños Guillermo Oliveri y Eduardo Valdés. Las alternativas posibles son incorporarlos a las boletas de Fuerza Porteña o que formen una lista por su cuenta encabezada por Ibarra para la Jefatura de Gobierno.
Los operadores de Kirchner ya aclararon que no tienen intención de ubicar a uno de los suyos como compañero de fórmula de Ibarra. La misma actitud asumió Carrió. El ex fiscal no se apresurará. “Hay tiempo hasta la primera semana de julio”, explicó y agregó que optará por “aquel que sea mejor para sumar y no dividir”.