El Frente Gremial Docente suspendió las medidas de fuerza que había anunciado y comunicó que llevará el reclamo por la reapertura de la negociación salarial a la reunión convocada para este viernes por el Ministerio de Trabajo bonaerense, en el marco de la conciliación obligatoria. Sin embargo, los docentes aclararon que no levantaron el paro “por acatamiento” a la conciliación, sino “en el marco de la autonomía de las organizaciones sindicales”. La razón reside en que, de cara al encuentro de pasado mañana, la titular de la cartera educativa, Nora De Lucía, adelantó que la discusión salarial “está cerrada”. Los gremios advirtieron que “si no hay renegociación salarial, no hay conciliación ni negociación posible”. El vocero del ministerio laboral, Ignacio Castro Cranwell, lamentó que hagan “foco solamente en un parte de la negociación, que es la salarial”, y explicó que la agenda a discutir incluye “todo tema que no involucre hoy un nuevo aumento”.

Finalizada la tregua en solidaridad con los afectados por el temporal que afectó a la ciudad de La Plata, volvió a recrudecer el conflicto entre los docentes bonaerenses y el gobierno de Daniel Scioli. Sin la reclamada convocatoria de las autoridades para renegociar el 22,6 por ciento de incremento salarial decretado, los gremios Suteba, FEB, UDA, AMET y Sadop anunciaron anteayer cuatro días de paro: 48 horas de huelga hoy y mañana y otras 48 horas el 7 y el 8 de mayo. Ese mismo día, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria y llamó a una primera reunión entre las partes en conflicto para el próximo viernes.

“En el marco de la autonomía de las organizaciones sindicales –respondieron ayer los maestros–, suspendimos las medidas y acudiremos a la convocatoria del ministerio, condicionando que cumpla con los extremos legales que tiene una conciliación y negociación.”

Los dirigentes del Frente Gremial remarcaron que no hay “acatamiento” a la conciliación obligatoria, porque “si no hay renegociación salarial, no hay conciliación ni negociación posible”. No obstante, opinaron que “el Estado no debe descontar los días de paro y tiene que haber una discusión libre, sin ningún tipo de restricción para poder resolver el conflicto, cuyo tema principal será la discusión salarial”. Voceros de Suteba le manifestaron a Página/12 que los abogados de las entidades sindicales estudian la posibilidad de objetar legalmente la conciliación ya que, entienden, pierde fundamento jurídico si obliga a las partes a discutir, pero se clausura el tema salarial, que es justamente el centro del conflicto.

“Es curioso que el mismo gobierno que, con un decreto, cercenó la posibilidad de seguir discutiendo sobre los salarios de los docentes, ahora dicte una conciliación para volver al diálogo”, criticó la secretaria general de FEB, Mirta Petrocini. Adelantó que dejarán “en suspenso las medidas de fuerza votadas por los educadores mientras dure el procedimiento de conciliación”, pero que “una vez finalizado el período establecido por el Ministerio de Trabajo, los trabajadores quedamos en libertad de acción y podríamos retomar el plan de lucha”. “No vamos a aceptar unilateralidad ni restricciones por parte del gobierno en el planteo de la agenda de discusión –concluyó– ya que la conciliación retrotrae el conflicto hasta sus inicios.”

Fuentes del Ejecutivo provincial defendieron la medida, cuyo uso fue avalado por el último fallo de la Suprema Corte provincial, siempre que se vea afectada “la paz social”, “la administración del conflicto colectivo” o “la preservación de los puestos de trabajo”. “En este caso, el ministerio se apoya en las primeras dos razones”, asintieron, y argumentaron que la cartera “no se convierte en juez y parte porque lo único que hace es generar un ámbito de negociación y discusión”. De esta manera, se establecen quince días hábiles, prorrogables por cinco más, durante los que se suspende la potestad constitucional de los sindicatos de hacer huelga y la capacidad de la parte empleadora de imponer sanciones y apercibimientos.

El director de Comunicación Institucional del Ministerio de Trabajo, Ignacio Castro Cranwell, cuestionó a los gremios docentes porque “están poniendo el foco solamente en un parte de la negociación, que es el aumento salarial, pero hay muchos otros temas que han demandado a los que buscamos darles respuesta, y tienen que ver, entre otras cosas, con cuestiones edilicias, de transporte y los aportes a IOMA”. Aseguró que “este gobierno ya hizo tres propuestas de aumento: del 17,8 por ciento, del 18,6 por ciento y del 22,6 por ciento. Se discutió largamente y no cerramos unilateralmente”. También planteó que el ministro Oscar “Cuartango ya lo dijo, el peor salario es el que no se puede pagar y Scioli jamás va a hacer una oferta que no se pueda pagar”. “No queríamos llegar a la conciliación –afirmó–, pero el esfuerzo lo hacemos con recursos propios y si bien cerramos siete paritarias seguidas, este año no se pudo.”

Así, para la provincia, la agenda del encuentro del viernes incluirá “todo tema que no involucre un nuevo aumento de salario, porque el gobierno dio el máximo que está en su posibilidades –señaló Castro Cranwell–. Ahora instamos a las partes a sentarse para ver entre todos cómo nos ponemos de acuerdo”. Desde el entorno de Nora De Lucía comentaron que para la cartera de Educación, “la paritaria está cerrada” y que el llamado a conciliación implica “abrir un ámbito de discusión y negociación para tratar distintos temas”, donde “el Ministerio de Trabajo pone la agenda”.

Informe: Juan Manuel Frías.