Elisa Carrió y Fernando “Pino” Solanas volvieron a ratificar ayer su alianza política en territorio porteño, que logró sumar al socialismo y al GEN y que terminó con las rupturas del FAP y Proyecto Sur en la Ciudad. Ambos calificaron el nuevo espacio electoral como un “gran frente ético” para terminar con la “corrupción” y el “saqueo histórico” del gobierno nacional, durante un encuentro realizado ayer bajo el lema “Por una Justicia independiente, contra la corrupción y la inseguridad”, junto a sus nuevos aliados Roy Cortina (PS) y Horacio Alcuaz (GEN).

“La urgencia de los tiempos lleva a unir a hombres y mujeres honestos, superando mezquindades, con un espíritu de servicio y expectativa de cambio”, dice uno de los párrafos del documento conjunto que leyó Cortina. “Esta unidad es la respuesta al reclamo de la sociedad”, aseguró Solanas, quien se quejó de la “sordera de quienes no escuchan el pedido de unidad de la gente”, en referencia a las fuerzas que se negaron a pactar con Carrió. “No me arrepiento de mi intransigencia, miren ustedes: los dos intransigentes pudieron juntarse y hacer la alianza más amplia que hoy tiene la Ciudad, mientras los demás no logran ponerse de acuerdo”, disparó la chaqueña a poco de empezar la presentación.