El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, admitió que volvió a considerar como posibilidad un acuerdo con Francisco de Narváez. El encargado de entablar las negociaciones es el intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino. Macri dijo ayer que el PRO tiene vocación dialoguista, pero que él se entusiasma especialmente “cuando se suma gente que tiene prestigio y que se arremanga para meterse en la política, como Lalo Ramos o Carlos Melconian”. Traducción: el acuerdo con De Narváez no le agrada, pero puede que no le quede otra alternativa. Ayer, desde el espacio de Roberto Lavagna cuestionaron a Gabriela Michetti. El líder de la CGT disidente, Hugo Moyano, consideró que “muchos trabajadores no la votarían nunca”.