EL PAíS
› LOS MUCHACHOS DE BARRIONUEVO SIGUEN EN EL PAMI
Petrecca y Hermoso resisten
A pesar del embate del propio presidente Kirchner y del anuncio de la CGT de separar a sus cuestionados representantes ante el PAMI, Domingo Petrecca y Reynaldo Hermoso siguen en sus puestos.
› Por Diego Schurman
Al parecer, Luis Barrionuevo no es el único fanático de “Resistiré”. Domingo Petrecca y Reynaldo Hermoso están demostrando por estos días una enorme pasión por el mismo hit. Es que, a pesar de haber sido conminados por la CGT a dejar sus puestos, los dos sindicalistas no se movieron del directorio del PAMI. “Nadie nos informó nada”, dijeron a Página/12 desde sus oficinas, mostrándose ajenos a un conflicto que hace días los tiene en el centro de escena.
El desplazamiento de Petrecca y Hermoso apareció en la puja del PAMI como una condición sine qua non para evitar la intervención de la obra social de los jubilados. Hubo fervientes negociaciones entre el Gobierno y la cúpula cegetista y un fuerte cruce verbal con Barrionuevo, quien ejerce una indiscutible influencia sobre los directores sindicales.
Finalmente, el secretariado de la CGT accedió al pedido oficial. Y emitió un comunicado anunciando el paso al costado de los sindicalistas.
El escrito mencionaba textualmente el “revocamiento de los mandatos” ante la “situación planteada, que es de pública notoriedad”. Estaba firmado por el jefe de prensa cegetista, Carlos West Ocampo, y se dio a conocer el mismo día que el Congreso habilitaba a Néstor Kirchner a intervenir la obra social. Por ahora, el Presidente mantiene el suspenso sobre cuál será la decisión final.
La presión pública hizo que hasta el propio Petrecca transitara varios programas de televisión asegurando que su renuncia era “indeclinable”. En rigor de verdad, el mismo planteo efectuó entre sus pares sindicales. Lo curioso –o a esta altura no tanto– fue que en la última reunión de directorio del PAMI, el pasado jueves, Hermoso asistió como un miembro más del cuerpo, como si nada hubiera ocurrido.
Página/12 se comunicó con los despachos de los sindicalistas en el PAMI. Atendieron sus asesores. Hermoso, explicaron, retornará hoy a su oficina. Estaba de viaje en el interior. Petrecca, quien se dijo que había pedido una licencia antes de dar el paso al costado definitivo, prefirió no ponerse al teléfono. Dicho de otro modo: ninguno de los dos había abandonado definitivamente sus poltronas.
La permanencia de los dos polémicos sindicalistas, procesados por la Justicia según un dictamen de la Oficina Anticorrupción, irritó a Kirchner. Y obligó una comunicación de urgencia a la CGT, desde donde le habían informado al Presidente de las supuestas renuncias de Petrecca y Hermoso.
Juan González Gaviola, el hombre designado por el Gobierno en la presidencia del PAMI, levantó ayer el teléfono para pedir explicaciones a Rodolfo Daer, el jefe de la CGT. Y éste se comprometió a elevar formalmente, y a la brevedad, el texto con las dimisiones de los dos sindicalistas.
¿Por qué tanta demora si las renuncias habían sido anunciadas el 19 de junio? El titular de la central juró y recontrajuró que ya había remitido los revocamientos la última semana, aunque –según se excusó– los papeles se los había devorado la “burocracia” de la obra social.
“No hay que inflar el tema. Lo concreto es que Petrecca y Hermoso renunciaron al PAMI y la CGT ahora se va a tomar un tiempo prudencial para designar dos profesionales que contribuyan al fortalecimiento del instituto”, señaló Daer a Página/12.
Presentado así, todo se reduciría a un problema de papelería. Pero hay un trasfondo que revela la fuerte puja que desató la crisis del PAMI. Por un lado entre el barrionuevismo y el Gobierno. A tal punto que en la última reunión de directorio hubo fuertes críticas a las decisiones de González Gaviola.
Si bien el representante estatal en el PAMI se excusó de hablar con la prensa, se supo que el conflicto que mantuvo con parte del directorio se originó por la suspensión de los contratos de odontología y audífonos, sobre los que ya había puesto la lupa. Hubo, además, otro tironeo al nohacer lugar a una asignación de dinero en efectivo a Hermoso para que este afrontara una supuesta deuda en Santa Fe. “Eso era improcedente y no resistía una auditoría de la AFIP”, señalaron en Gobierno.
Además de la pelea de Barrionuevo con el Gobierno está la del propio senador con la CGT, en especial con Armando Cavalieri, con quien compite por el negocio de salud. Por esta puja se volvió imposible reunir al consejo directivo de la CGT, de donde debían salir sin tantos dimes y diretes las renuncias de Hermoso y Petrecca.