A partir de ayer, en la provincia de Buenos Aires se podrá votar en forma electrónica, como se hace en Brasil. La iniciativa había sido impulsada por la gobernación bonaerense, fue aprobada por Diputados y ayer fue sancionada por el Senado. Con esa resolución, la Cámara modificará la ley electoral 5109, por lo que el Ejecutivo podrá implementar el voto electrónico con un sistema similar al que llevó a Luiz Inácio Lula da Silva a la presidencia brasileña. Además de usarse en Brasil, el voto electrónico se aplica en Paraguay y México, y también en Bélgica, España, Japón y Holanda, aunque en esos países se emplea en forma experimental.
Tras la aprobación, se prevé probar el nuevo método con un test piloto en los veinte distritos de menor población de la provincia. Según el texto de la ley, el gobierno provincial podrá utilizar total o parcialmente el “sistema de voto electrónico en los distritos que lo considere pertinente”. Sin embargo, para poder aplicar la norma en los próximos comicios –en los que se elige también diputados nacionales–, el Congreso deberá modificar el Código Electoral. Sólo así se podría elegir los cargos nacionales en forma electrónica.
El sistema elegido utiliza la misma tecnología que aplica el Tribunal Superior Electoral de Brasil. Se trata de una computadora con tres botones: uno para elegir al candidato para cada cargo, otro para corregir errores y un tercero para el voto en blanco. Los datos que ingresan se almacenan en un disco magnético que está dentro de la urna. Además del bajo costo, en la gobernación bonaerense aseguran que este método electoral brinda más seguridad y transparencia en el proceso y que también permite hacer el recuento de votos a mayor velocidad. Si todo sale bien, el resultado del escrutinio podría hacerse público unas pocas horas después del cierre de la votación.
Para avanzar con el proyecto de voto electrónico, el gobierno bonaerense se reunió varias veces con representantes del Tribunal Superior Electoral de Brasil, y hasta se firmó un convenio con ese organismo para que ese país le preste a la provincia la tecnología necesaria. Desde la gobernación que encabeza Solá dicen que este método permitirá que la provincia ahorre un monto de entre 10 y 15 millones de pesos.