El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, salió al cruce de la decisión de la UCR bonaerense que apunta a expulsar de sus filas a los intendentes radicales que se pasaron a las filas del massismo. Posse argumentó que su “ADN es desarrollista y frentista” y que continuará “convocando a referentes de distintos orígenes para trabajar junto a Sergio Massa”. “La gente pidió en las urnas que la oposición se una, no para responder a sus preocupaciones”, desafió Posse y ratificó su pertenencia al massismo, con el que ya trabaja en el armado de la estrategia provincial de cara a los comicios para gobernador en 2015. “Desde 1997 formo frentes electorales con varios partidos”, recordó Posse, quien en algún momento fue también un radical K.