Distintos sindicatos docentes mantuvieron ayer reuniones con los ministros de Educación, Alberto Sileoni, y de Trabajo, Carlos Tomada, donde se pronunciaron a favor de desdoblar las paritarias para realizar un primer acuerdo que vuelva a ser discutido cerca de mitad de año, con el objetivo de que “el salario tenga un monitoreo”. Por un lado se produjeron las conversaciones con los secretarios generales de los sindicatos docentes nacionales afiliados a la CGT, Jorge Dobal (AMET), Fabián Felman (CEA), Sergio Romero (UDA) y Mario Almirón (Sadop). Por el otro, los nucleados en la CTA, encabezados por la titular de Ctera, Stella Maldonado, quien anticipó a Página/12 que solicitarán “un aumento significativo en el bolsillo de los docentes”, dada la devaluación y el aumento de precios de las últimas semanas.

Con el antecedente delicado del año pasado, en el que finalmente no hubo acuerdo y el gobierno nacional dispuso un 22 por ciento de aumento sin el aval de los sindicatos, los ministros Sileoni y Tomada convocaron por separado a los docentes a una reunión “preparatoria”, con el objetivo de conocer sus posiciones antes de empezar formalmente la discusión, la próxima semana.

“Hicimos un planteo general ya que de acuerdo con lo que ha sucedido desde diciembre hasta acá tenemos muchas inquietudes respecto de las variables de la economía, que significan el deterioro del poder adquisitivo del salario. Por eso planteamos la necesidad de lograr un acuerdo de corto plazo para luego reabrir la discusión”, detalló Maldonado en diálogo con este diario. Desde Ctera, el gremio docente más representativo, remarcaron que, si bien el Gobierno realizó una “devaluación chica”, ésta no deja de tener impacto en el poder adquisitivo y debe haber una recomposición.

Por otra parte, Maldonado recordó que recién en diciembre pasado el sueldo inicial llegó a 3416 pesos, quedando por debajo del salario mínimo, vital y móvil, ubicado en 3600. Los docentes vinculados a la CTA consideraron entonces que primero debe aumentarse a 3600 y que a partir de allí comenzará la discusión paritaria, a aplicarse desde febrero. “Nosotros creemos que hay un ataque especutalivo muy grande, que están operando los sectores concentrados del capital, intentando incluso que todavía se profundice la devaluación”, remarcó la sindicalista, en línea con la posición fijada por el secretario general de la central, Hugo Yasky.

En su reunión, los sindicatos nucleados en al CGT plantearon cuestiones similares. “La posición es firme en cuanto a desdoblar la paritaria y hacer un primer acuerdo ahora que volvería a ser discutido en junio para que el salario tenga un monitoreo”, expresó Romero, de UDA. Mediante un comunicado, Sadop informó que planteó “la necesidad de tomar en cuenta la absoluta insuficiencia del salario fijado en 2013 por el Estado para atender las necesidades de la canasta básica del docente y su gran atraso histórico, agravado por la actual coyuntura económica”. El sindicato de docentes privados afirmó que coincidieron con los otros gremios en la necesidad de discutir otras condiciones de trabajo además del salario, “en procura de concretar un Convenio Colectivo de Trabajo integral”.

Los gremios docentes avisoran una paritaria “complicada” dado el fracaso de la negociación anterior, el deterioro salarial respecto de la inflación y el actual contexto económico luego de la devaluación del peso. En un contexto de “incertidumbre” coincidieron en pedir un acuerdo para los primeros meses del año, luego de los cuales podría abrirse un panorama más claro. De todas maneras, la paritaria nacional fija un “piso” del salario docente sin antigüedad para las distintas categorías. Sin embargo, cada gremio debe discutir luego con los distintos gobiernos provinciales la conformación final del salario.