Las distintas centrales obreras salieron ayer a marcar posición respecto del discurso realizado por la presidenta Cristina Fernández en cadena nacional. Desde la CTA que comanda Hugo Yasky consideraron positivo el aumento del 11,31 por ciento en las jubilaciones y de más del 200 por ciento en la Asignación por Ayuda Escolar, al tiempo que advirtieron la necesidad de “hacer un esfuerzo” en las paritarias para recuperar la situación de aquellos sectores que quedaron más retrasados, como los trabajadores no registrados o los docentes. Los sindicalistas Gerardo Martínez (Uocra) y Ricardo Pignanelli (Smata), encolumnados en la CGT de Antonio Caló, apuntaron contra los empresarios y formadores de precios, en línea con las críticas realizadas por la Presidenta. “Los formadores de precios siguen atacando la economía de los laburantes y eso provoca que la gente se ponga nerviosa”, aseguró Pignanelli, que se desmarcó de los cuestionamientos a los gremialistas porque “hoy no hay (sector) más prudente que el movimiento obrero”. Del otro lado, el camionero Hugo Moyano consideró insuficientes las medidas y consideró “patética” la forma en que la Presidenta se refirió “a los empresarios y sindicatos amigos”.

“Hay trabajadores que tienen más espalda, que vienen de actividades con una renta alta y que han logrado buenas paritarias. Pero hay otros, como los no registrados o los docentes, a los que los aumentos los ponen con la cabeza debajo del agua y hay que hacer un esfuerzo en las paritarias para que esos trabajadores puedan recuperar su situación”, señaló ayer Yasky, al referirse a la situación económica y el comienzo de las negociaciones salariales. Respecto de la alusión de la Presidenta a una frase de Antonio Caló en la que había asegurado que “a la gente no le está alcanzando para comer”, Yasky señaló que él “no hubiera empleado esa frase”, aunque defendió la postura de su par de la CGT. “Creo que es un buen dirigente sindical, expresó la situación de los trabajadores y no de todos, porque esa podría haber sido en todo caso la observación”, concluyó.

El secretario general de la Uocra, Gerardo Martínez, encolumnado en la CGT de Caló, le restó importancia al entredicho y remarcó que “hay un gobierno que ha tomado cartas en el asunto y no se ha quedado con los brazos cruzados ante estos nubarrones”, en referencia a la situación económica. El sindicalista de la construcción cargó contra los “empresarios especuladores”, y sostuvo que “hay muchos que han ganado sumas millonarias con la inflación”. Martínez señaló que la actual coyuntura “no es tan grave” y que “no hay que dejarse correr por los cantos de sirena negativos”. “Los trabajadores siempre tenemos que pedir y reclamar porque esa es nuestra lucha, (pero) seguramente cualquier compañero no quiere pasar lo que pasamos en otra época”, concluyó.

Pignanelli hizo hincapié en “el monopolio que está manejando la formación de precios”. “Después nos agarran a nosotros los gremialistas y nos dan con un garrote por las paritarias. Yo creo que más prudente que el movimiento obrero hoy, no hay. Tendríamos que salir a la calle a darle un escarmiento a todos estos que nos quieren hacer volver al 2001”, remarcó el sindicalista, que criticó a los agroexportadores que no liquidan los granos y a los supermercados que remarcan los precios. El líder de Smata sostuvo que no se pueden realizar paritarias por un año y en cambio puso de ejemplo su gremio, con negociaciones cada tres meses.

Fiel a su estilo, Moyano consideró “lamentables” las palabras de CFK sobre los gremios y deslizó que “a lo mejor, está buscando la forma de provocar algo como para justificar a lo mejor su salida”.