Fernando Solanas y el obispo Jorge Lozano se reunieron para hablar de “la inseguridad y el narcotráfico” en el país. “Ahora todo el mundo se ocupa, pero muchos de estos altos funcionarios no pueden decir que no estaban al tanto, fueron informados”, declaró Solanas y agregó que “desde 1996 denuncié la existencia de más de mil pistas clandestinas de aterrizaje de la droga”. Solanas denunció que “la expansión del narcotráfico se ha realizado en la Argentina con la complicidad del sistema de Inteligencia, con sectores de las fuerzas de Seguridad, como la Federal y también provinciales y con sectores de la Justicia que no actuaron con la contundencia con que debieron actuar”.