El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, salió a poner paños fríos sobre el debate por el borrador del Código Penal. “Se trata de un anteproyecto que está en proceso de evaluación por parte de las distintas áreas”, señaló ayer el funcionario y agregó que “será una decisión de la Presidenta (Cristina Fernández de Kirchner) la remisión del texto al Congreso para su análisis por las comisiones respectivas”.

“El anteproyecto ha sido elaborado por una comisión de especialistas desde una expresión plural”, reiteró el jefe de Gabinete, remarcando la composición del grupo que trabajó en el anteproyecto de Código Penal que fue presentado a la Presidenta. “Este anteproyecto implica la evaluación por parte de distintas áreas del Gobierno a los efectos de revisar cada una de sus partes”, señaló el ex gobernador chaqueño después de recordar que el actual texto contiene “900 reformas en sus distintos artículos e incisos” por lo que, “en definitiva, pierde la armonía propia de un código”.

La explicación de Capitanich puso distancia de las acusaciones y críticas con las que la oposición salió al cruce de la iniciativa, fundamentalmente el Frente Renovador que encabeza Sergio Massa, al que luego se sumaron hasta los propios bloques que participaron en la comisión que confeccionó el borrador, como el macrismo y el radicalismo.

La presidenta del bloque del Frente para la Victoria en diputados, Juliana Di Tullio, salió a respaldar la postura de Capitanich. “Es un borrador, no tiene estado parlamentario”, sostuvo la diputada y agregó que no sabía si la propuesta “se va a tratar en el Congreso este año, pero estamos listos para debatir cuando sea necesario. Por ahora es lo que es, un borrador, lo demás es pura fantasía”.