Ni incitación ni apología sino simplemente “un extracto que forma parte de un discurso de neto corte político”. De esta manera, el juez federal Jorge Urso desestimó ayer una denuncia contra la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.
La dirigente había sido acusada de apología del crimen, instigación a cometer delito e intimidación pública durante el discurso que pronunció durante el acto por el primer aniversario del asesinato de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.
De esa manera, el magistrado no hizo lugar a una acción presentada por el abogado Juan Aberg Cobo que, inclusive, había solicitado la “inmediata detención” de Bonafini a raíz de sus declaraciones públicas de la mujer.
La reacción de Cobo se produjo luego de que Bonafini asegurara en su discurso que “la única revolución que sirve es la que se hace con las armas”. Al desestimar la denuncia, Urso destacó que “parte del discurso es una cita de los dichos de Hugo Chávez, presidente de la República de Venezuela”, y que “lejos se encuentra de ser una alabanza, ponderación o intento de exaltación de algo”.